Las vías rápidas y con mayor capacidad de tráfico y los entornos de colegios y centros educativos son los principales objetivos de la campaña que acaba de poner en marcha el Ayuntamiento de Alicante y que busca mejorar la seguridad vial reforzando la vigilancia y el control de los límites de velocidad. Una veintena de agentes de la unidad de tráfico y de la Policía local se asegurará de que no se superen los límites, lo harán en turnos de mañana, tarde y noche y mediante radares móviles. Desde la Concejalía de Seguridad, defienden que reducir la velocidad reduce accidentes y el riesgo de atropellos, mejora la convivencia y la calidad de vida. Se trata de una medida que también responde a la petición de varios colectivos vecinales que reclamaban mayor control. Les recordamos que el límite máximo de 50 km hora se aplica en vías de dos o más carriles por sentido, que este baja a 30 en las calles de un solo carril por sentido, y a 20 en las vías con calzada y acera unificadas en plataforma única.