Temerosos, vulnerables e inseguros. Así se sienten los comerciantes de la céntrica calle Gerona, en la ciudad de Alicante, ante la oleada de robos que se están produciendo en las últimas semanas en sus establecimientos. La asociación de comerciantes de la zona alza la voz y pide al Ayuntamiento que tome en serio sus denuncias y aumente la seguridad. “Es una zona de fiesta. Estamos al lado de Castaños y tenemos una discoteca que abre hasta las siete de la mañana. Tenemos miedo de llegar y encontrarnos todo roto”, declara su presidente, Ebrahim Khalighy.
Los propietarios de estos locales aclaran que este grupo, que en las últimas semanas ha incrementado la frecuencia de sus robos, es conocido en la zona y que, presuntamente, se trata de varios okupas cuyo cabecilla ya ha sido localizado por la Policía Nacional en varias ocasiones. Sin embargo, la peculiaridad de sus actuaciones es que roban bebidas alcohólicas y material de oficina, como datáfonos o impresoras; y, en alguna ocasión, también se han atrevido con las cajas registradoras. Rafael García, colaborador en uno de los establecimientos afectados —que recientemente acababa de abrir—, se muestra profundamente “preocupado e inseguro”. “Encaramos los fines de semana atentos a lo que pueda pasar. A mí me avisó un vecino y, cuando llegué, tenía la puerta rota y ya no estaban”.
La Asociación de Comerciantes de la Calle Gerona y colindantes ya ha comenzado a trasladar su malestar por la situación al Ayuntamiento de Alicante y espera una rápida respuesta para poder abrir la persiana cada día con la seguridad de que sus comercios, restaurantes y locales permanezcan de una sola pieza.