Con 1.765 industrias censadas, la Foia de Castalla es una auténtica potencia en la que destaca su variedad de sectores y su capacidad para adaptarse a los nuevos tiempos. Esta comarca, con cerca de 50.000 habitantes, ha sabido superar la crisis del juguete de los años ochenta, generando numerosas alternativas de producción, que van desde un pujante sector del plástico a empresas con un fuerte componente tecnológico.

La mejor expresión de este estado de cosas son los 4 millones de metros cuadrados de polígonos industriales que se reparten entre los términos municipales de Ibi, Castalla, Onil, Tibi y Biar. El avance de las obras de la autovía central ha supuesto un auténtico "boom" en este sentido, ya que además de fomentar la actividad empresarial en la zona, ha logrado captar marcas de fuera, atraídas por las mejoras en las comunicaciones.

En la zona predominan las medianas empresas, aunque con una gran gran productiva. Un estudio, realizado por la patronal comarcal, señala que las 70 primeras empresas de la Foia han alcanzado un facturación anual que ronda los 780 millones de euros. En este mismo informe, se revela que se mantiene una tendencia sostenida de crecimiento.

En los últimos años, esta comarca también ha empezado a desarrollar políticas de distrito industrial. La unificación de las asociaciones empresariales ha supuesto la apertura de líneas de desarrollo territorial común. También se han efectuado contactos con el Alto Vinalopó y las áreas industriales de l'Alcoià y El Comtat.