El Gobierno central ha decidido prorrogar durante un año más la normativa vigente en materia de arcabuces para las Fiestas de Moros y Cristianos, en vigor desde 1999, por lo que continuará siendo válida hasa el 30 de abril de 2011, según una disposición de la Delegación en la Comunidad, a través de su titular, Ana Botella.

El 8 de marzo de 1999 entró en vigor un protocolo de instrucciones dado por la Delegación del Gobierno para la autorización del uso de armas de avancarga en las fiestas tradicionales, con una vigencia de un año. Desde entonces, según señala la propia Delegación, se viene prorrogando la vigencia.

Ahora, Ana Botella, en una resolución firmada el pasado 19 de abril y publicada ayer en el BOP, recoge que "la experiencia del tiempo transcurrido y la permanencia de las circunstancias que llevaron a la publicación de las instrucciones... aconsejan su prórroga durante un año".

Esta normativa permite utilizar los trabucos mediante la presentación de un documento como el carné de conducir, que acredita haber superado un psicotécnico, pero choca frontalmente con la que se está introduciendo actualmente, en virtud de directrices europeas.

Esta nueva legislación, que ya se está aplicando en parte en Alcoy, obliga a revisar los arcabuces y homologarlos en un taller autorizado, a la vez que intensifica las medidas de control de los festeros en cuanto a la manipulación de la pólvora.

Hay que recordar que sigue vigente la norma de 1 kilo de pólvora por festero, pero todo apunta a que esta cantidad puede incrementarse en los próximos años. Como informó este diario el pasado sábado, el Gobierno prevé autorizar un aumento siempre que se pueda disponer de polvorines portátiles.