Una empresa acaba de abrir en el polígono de Rabasa el primer taller en el que los propios conductores se arreglan su vehículo. El ahorro de las reparaciones puede llegar al 50%. Y eso, en tiempos de crisis, es un alivio. Contra la crisis, soluciones. Y si son innovadoras, mucho mejor. Eso pensó María José Abad cuando decidió abrir en Alicante un taller en el que son los propios conductores los que arreglan su vehículo. Se trata de una iniciativa pionera en la Comunidad que permite a los particulares ahorrarse una buena cantidad de euros en las reparaciones y el mantenimiento de sus coches. "Sale entre un 40 y un 50% más barato que si llevas el automóvil o la moto al taller", explica Abad.
El funcionamiento de estas peculiares instalaciones es muy sencillo. Los conductores alquilan un box dependiendo de sus necesidades y acometen en él "todo lo que quieran". El precio del arrendamiento oscila entre los 10 y los 21 euros la hora e incluye el asesoramiento de un mecánico especializado por si surge cualquier duda. "Hay algunas personas que cambian el aceite y las pastillas de freno, por ejemplo, pero les da reparo sustituir la correa de distribución. Nuestro mecánico les asesora en todo momento sobre cómo deben hacerlo y, si aún así siguen sin verlo claro, les ayuda a cambiarla", agrega Abad.
El taller está concebido tanto para coches como para motos y pone en la mano del usuario tecnología de última generación para las reparaciones. En sus 800 m2 hay una cabina de pintura, bancada, elevadores de todo tipo, máquina de aire acondicionado, soldadoras, lijadoras, pistolas de pintura, máquina para sustituir neumáticos... En resumen, "todo lo necesario".
Origen de la iniciativa
La idea de "Make it Car" -así está bautizado el taller- nació en la ciudad alemana de Frankfurt, donde estas instalaciones son bastante utilizadas para la puesta a punto de los vehículos de dos y cuatro ruedas. "Tras varios años de maduración de la idea, decidimos trasladar el concepto y adaptarlo para poder ofrecer a los españoles la posibilidad de que tuviesen un lugar donde reparar sus vehículos, al igual que se hace en Alemania, al mejor precio posible, pero sin disminuir la calidad", señala Abad.
Ricardo Carcelén ha sido ya uno de los primeros alicantinos en pasarse por "Make it Car". Esta semana ha llevado su moto al taller y le ha cambiado las pastillas de freno. "Es la primera vez que vengo y me voy muy contento. La mecánica es más fácil de lo que parece si se le pone interés y lo mejor es que me he ahorrado cerca de 50 euros", resaltó. Abad reafirmó sus palabras e insistió en la "facilidad" de la mayoría de reparaciones: "Si hoy en día somos capaces de montar un armario o una cama, por qué no repararnos el vehículo, que es 100 veces mas fácil".
El taller está ubicado en la calle Fortuny 31, en el polígono industrial de Rabasa, y abre de 9 a 22 horas durante los siete días de la semana.
