La alcaldesa de Alicante, Sonia Castedo (PP), ha negado hoy cualquier "apaño" en relación con el sector Lomas de Garbinet, enmarcado en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad, para beneficiar al constructor Enrique Ortiz, imputado en el 'caso Brugal'.

Al igual que lo hiciera días atrás con respecto al Programa de Actuación Integrada del sector PE/APA 9 "Vistahermosa", al PAU 3, al proyecto de remodelación del estadio 'José Rico Pérez' y a varias parcelas, todos ellos del PGOU, Castedo ha aportado hoy, como quinta entrega a los medios de comunicación, la documentación relativa al sector Lomas de Garbinet.

En el escrito firmado por la regidora que acompaña a esa documentación, Castedo señala que, en 1972, la mercantil Calpisa, propietaria de los terrenos, presentó ante el consistorio un proyecto para desarrollar urbanísticamente el territorio conocido como "Lomas de Garbinet".

Según la regidora, "el Plan General de 1987, sin embargo, califica ese territorio como 'suelo no urbanizable'", lo que llevó a "la propiedad a recurrir ante los tribunales, que fallan a su favor" y lo califican "como 'urbanizable no programado (...)".

Una "nueva calificación que posteriormente recogería una resolución del conseller de Obras Públicas del 19 de abril de 2000 a favor de la mercantil, por entonces denominada ya Alicantina de Construcción y Edificio, S.A.", afirma la regidora.

"En el año 2002, el concierto previo de la revisión del PGOU (aprobado por la Conselleria en 2003) dibuja un ramal directo de la autovía A-7 con la Vía Parque, que literalmente cruzaba el APA-9 (aprobado definitivamente en 1993), lo que de facto suponía una sustancial modificación del planeamiento de este último sector", según Castedo.

La alcaldesa sostiene que, en 2008, "la Dirección General de Carreteras (Ministerio de Fomento) comunica expresamente la necesidad de reformar el enlace 'Alicante Norte' plasmado en la documentación expuesta al público" en octubre de ese año, "exigiendo su adaptación para permitir una nueva conexión de entrada y salida de la autovía al casco urbano, a través de la Vía Parque".

En "cumplimiento del citado informe ministerial y de los firmados por técnicos municipales, el equipo redactor del PGOU modifica lo planteado en 2008, rediseñando el trazado de ese ramal de la autovía para desembocar en la Vía Parque, con una vía de servicio que desemboque en la plaza de Castalla sin afectar a un APA-9 aprobado quince años antes", mantiene la regidora popular en su escrito.

"Una comparativa entre el plano del 2002 y el del 2010 confirma el mismo planeamiento con el modificado de la autovía", según Castedo.

La alcaldesa manifiesta que "a eso" se "refería exactamente cuando" comunicó "al empresario Enrique Ortiz" que "le había 'apañado' el problema detectado entre el APA-9 y Lomas de Garbinet", una "expresión" que "lleva a sospechar a los investigadores policiales y al fiscal que se había modificado el planeamiento urbanístico en beneficio del empresario".

"Pero nada más lejos de la realidad", asegura Castedo, para quien "a esa conclusión se habría llegado de existir una firme voluntad de trabajar bien... de 'investigar' en base a la verdad".