Cerca de trescientos agricultores y representantes de las principales comunidades de regantes de la Comunidad Valenciana se concentraron ayer en la sede de la Delegación del Gobierno en Valencia para defender la supervivencia del regadío, ahora amenazada, según aseguran, por «el tarifazo eléctrico». Los regantes firmaron un manifiesto en el que reclaman al Gobierno central una tarifa eléctrica «justa», así como la aplicación de un IVA reducido en la factura energética. El presidente de la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunidad Valenciana (Fecoreva), Benjamín Aparicio, aseguró que la situación actual es «insostenible», ya que la factura eléctrica representa más del 40% de los costes en la agricultura del regadío. La reforma energética del pasado mes de julio, que se suma a las implantadas tras el inicio de la crisis, ha supuesto un sobrecoste de 100 millones de euros para el conjunto del regadío español, y de más de 5 millones de euros para los regantes de la Comunidad Valenciana. Mientras, el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, aseguró ayer que su ministerio estaba buscando fórmulas que satisfagan las demandadas de los regantes. J. S.
