Los pantanos de la provincia de Alicante afrontan el verano al límte de su capacidad. Los embalses de Beniarrés, Amadorio y Guadalest presentan sus mejores registros históricos para esta época del año como consecuencia de las abundantes lluvias y también por la fuerte caída del consumo durante el confinamiento por el coronavirus. Las reservas que se almacenan en estos momentos garantizan el abastecimiento a la zona costera de Benidorm, la parte baja de El Comtat y la comarca de la Safor no solo para la temporada estival, sino también para lo que resta del año e incluso, en condiciones normales de pluviometría, el próximo.
Las generosas lluvias registradas tanto en el invierno como en la primavera han tenido un efecto muy beneficioso en los pantanos ubicados en la provincia de Alicante. De acuerdo con los datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), el embalse de Beniarrés se encuentra en estos momentos al 94% de su capacidad, con 25,6 hectómetros; el de Amadorio al 80%, con 12,6; y el de Guadalest al 79%, con 10,2. Se trata de porcentajes totalmente inusuales, de hecho los mejores registros históricos para esta época del año, circunstancia a lo que ha contribuido también la bajada del consumo durante el confinamiento por la crisis del coronavirus.
Así lo ha señalado a este diario Jaime Berenguer, director del Consorcio de Aguas de la Marina Baixa, donde se encuentran ubicados los pantanos de Amadorio y Guadalest. Según la información facilitada, en los primeros seis meses del año la disminución del consumo en toda la zona ha sido del 20%, debido principalmente a que la zona costera de Benidorm ha tenido una población muy inferior a la habitual debido a la ausencia de visitantes. Las caídas, en concreto, se concentran en los meses de marzo, con un 13,8% menos; abril, con un 34%; mayo, con un 25%; y junio, con un 31%. Berenguer destaca que con las lluvias registradas en la última parte del año pasado los embalses ya presentaban un estado óptimo, algo que se reforzó ya este año con el temporal Gloria. Y no sólo los pantanos se encuentran en unas excelentes condiciones, sino también los acuíferos, caso de Algars y Polop, que «están al 100% recuperados».
Con estas condiciones, toda la comarca de la Marina Baixa, con la zona costera de Benidorm a la cabeza, tendrá el abastecimiento garantizado no sólo esta temporada estival, sino lo que resta del año e incluso el próximo, siempre que la pluviometría sea normal.
Se descarta así de entrada que se tengan que realizar aportaciones a través de la conducción de Rabasa-Fenollar procedentes del trasvase del Júcar o la desaladora de Mutxamel.
En lo que respecta al pantano de Beniarrés, su misión principal, aparte de regular las crecidas del Serpis, pasa por suministrar agua para el riego a la parte baja de El Comtat y a la Safor. También en este caso los suministros están plenamente garantizados.
En la provincia también destaca el pantano de la Pedrera, en Orihuela, si bien sus recursos dependen del trasvase del Júcar. En la actualidad se encuentra al 40% con 102 hectómetros cúbicos, apoyado por la buena situación de los embalses de la cuenca del Segura.
