Salud Pública está estudiando caso por caso la situación epidemiológica de cada colegio e instituto para decretar su cierre si fuera necesario. La secretaria autonómica, Isaura Navarro, explica a preguntas de INFORMACIÓN que el cierre de un centro educativo vendrá determinado, en cualquier caso, por la pérdida de la trazabilidad de los contagios. «Cuando haya una transmisión comunitaria descontrolada dentro del centro educativo se determina su cierre», concreta.

En este sentido y sobre el cierre del centro privado Newton College de Elche, que desde el jueves envió al alumnado a casa para seguir las clases online hasta el 8 de febrero, la responsable de Salud Pública señala que no se ha confirmado dicha pérdida de trazabilidad. Al respecto, y desde la Conselleria de Educación, añaden que se ha notificado formalmente al centro educativo que no pueden cerrar de forma unilateral, por lo que deberán reabrir el próximo lunes, día 25, de nuevo para seguir impartiendo las clases presenciales.

La escalada de la pandemia y su traslado a las aulas aumenta por otra parte la preocupación entre los docentes y buena parte de sus representantes en los sindicatos STEPV, UGT y CSIF, han planteado ante los responsables educativos la conveniencia de cerrar la aulas puntualmente, como también lo han hecho los representantes de los padres de alumnos desde la Confederación Covapa, como publicó este diario.

«Vemos conveniente que la conselleria valore la posibilidad de cerrar los centros de manera generalizada hasta que cambie la situación, o bien que cierren los que presenten un alto índice de casos covid. Es complicado por la situación de muchas familias, pero es estos momentos, la concentración de alumnado y profesorado en los centros refleja altos índices de contagio y no son tan seguros», valora el delegado provincial del STEPV, Ignasi Amorós.

Pepe Gil, secretario de Educación de UGT-PV , plantea asimismo un cierre de centros durante 15 días «como medida de urgencia para aplanar la curva»; al igual que Javier Mas desde CSIF, que aboga «por el cierre de centros educativos de manera preventiva» hasta que se reduzca la curva de contagios.

El presidente de ANPE, Lauren Bárcena, reclama «datos reales» de los contagios en las aulas, y medios suficientes para el profesorado, pero la decisión del cierre la deja en manos de Sanidad, como Xelo Valls, secretaria general de CC OO.

El departamento que dirige el conseller, Vicent Marzà, mantiene por su parte que los centros siegue siendo seguros porque «9 de cada 10 contagios proceden del ámbito social», y que es este mensaje el que se debe difundir entre las familias para combatir la ausencia de alumnos en las aulas por temor al contagio.

Tampoco se plantean «en estos momentos» modificar el protocolo y permitir a los directores decidir de forma preventiva sobre el confinamiento de aulas, pese al retraso acumulado en informar desde Sanidad y la inquietud que genera en los padres. «El confinamiento de aulas es competencia de las autoridades sanitarias», subrayan desde Educación.

Por otra parte, el Consell ratificó ayer la dotación por urgencia del ancho de banda en los 600 centros educativos de la provincia para mejorar la enseñanza online desde el curso próximo.