La noche de fiesta en una casa de citas les saldrá un poco cara con las sanciones impuestas por la Policía Nacional. Seis personas que se encontraban en la madrugada de ayer en una casa de citas de la zona centro de Alicante fueron sancionadas al estar en el prostíbulo sin respetar ninguna de las medidas sanitarias que están en vigor por el covid-19. Además de las sanciones a dos clientes y a cuatro mujeres que ejercían la prostitución en la vivienda, la Policía Nacional ha solicitado la clausura de la casa de citas por incumplimiento de la normativa autonómica en materia de apertura de locales y establecimientos públicos, según informó ayer la Comisaría Provincial de Alicante.

La intervención policial, realizada por el Grupo Operativo de Respuesta de la Comisaría de Distrito Centro de Alicante y de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana, se produjo sobre las dos de la madrugada. Una patrulla que estaba de servicio detectó en la zona centro de Alicante un taxi que estaba trasladando a un hombre durante el toque de queda y observaron que el vehículo comenzó a realizar un itinerario sin mucho sentido ante la presencia policial.

Por ello, la Policía procedió a realizar de forma discreta un seguimiento al taxi. Cuando concluyó su servicio y se apeó el pasajero le siguieron por varias calles de la zona centro hasta que se detuvo en un portal de un inmueble de la calle Navas.

Los agentes abordaron a este hombre para preguntarle por el motivo de estar en la vía pública durante el horario de restricción nocturna de movilidad de personas y les confesó que se dirigía a una casa de citas en el inmueble. Un motivo que, aunque alguna persona lo considere una necesidad básica como el comer, no parece estar entre las justificaciones que eximen a los ciudadanos de incumplir el toque de queda.

Tras la manifestaciones del cliente de la casa de citas, los agentes comunicaron los hechos al resto de patrullas de servicio y se organizó un dispositivo para acceder a la casa de citas y comprobar la veracidad de los hechos relatados.

Uno de los agentes que iba de paisano se hizo pasar como cliente y subió hasta la vivienda. Llamó al timbre y le invitaron a entrar. Una vez accedió al interior y comprobó que se trataba de una casa de citas con varias mujeres y clientes avisó a sus compañeros y se procedió a realizar una inspección.

La Policía Nacional levantó seis actas de sanción por incumplir la normativa sanitaria de uso de mascarillas y número de personas reunidas en la misma casa sin ser del mismo núcleo conviviente.

Las personas sancionadas eran dos clientes y cuatro mujeres que ejercían la prostitución en la céntrica vivienda de Alicante.