El Ayuntamiento de Benidorm pagará de forma fraccionada en varias anualidades los 4,1 millones de la expropiación de una parcela para el futuro parque de Foietes, tras el auto de ejecución definitiva del pasado 15 de abril del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat (TSJCV).

Ese auto daba al Ayuntamiento el plazo de un mes para abonar al propietario de la parcela 2,7 millones de euros "más los intereses legales correspondientes" y los intereses de los casi 900.000 euros que ya percibió en noviembre de 2010 -en total 1,4 millones de euros más- por la expropiación de una finca de 4.103 metros cuadrados.

Desde el Ayuntamiento se han mantenido reuniones con los abogados de este particular y se ha acordado liquidar los 4,1 millones de esta expropiación en varias anualidades.

El consistorio y este particular deberán firmar un convenio que recoja el pago fraccionado, que deberá ser aceptado por el TSJCV.

Según la documentación a la que ha tenido acceso Efe, para liquidar esta expropiación en 2013 se realizará un pago único de 270.000 euros y desde enero de 2014 a diciembre de 2016 se efectuarán abonos mensuales de 105.561,32 euros.

Además, la corporación municipal tendrá que asumir los intereses correspondientes al fraccionamiento, que se abonarían con el último pago.

Para afrontar el pago de los 270.000 euros de 2013 se emplearán fondos procedentes de partidas presupuestarias de las concejalías de Urbanismo, Turismo y Personal.

De acuerdo con la propuesta de modificación presupuestaria que se ha aprobado hoy en comisión informativa, se emplearán 50.000 euros que estaban destinados a estudios y proyectos de Urbanismo, 100.000 euros de festejos populares del área de Turismo y 120.000 euros previstos en la partida de gratificaciones de Personal.

Dicha propuesta, que deberá ser ratificada por el pleno, tiene el visto bueno del interventor municipal que, en un informe, sostiene que la operación está "nivelada", no produce "déficit inicial" y no afecta a la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.

Esta expropiación se inició en 2004 y, tras varios recursos judiciales, su precio se ha disparado hasta los 4,1 millones de euros