Me parece harto interesante la idea de Julijonas Urbonas y su montaña rusa de la muerte: un paseo de 3 minutos que te lleva por una larga pendiente de poco más de 500 metros para dejarte caer de forma masiva, realizando 7 giros estratégicamente distribuidos, todo en un minuto. Los 10 Gs de fuerza gravitacional, aparte de subir la adrenalina, te matarán por hipoxia.

Con certeza este diseñador lituano se ha ganado mis simpatías. Al parecer anda promoviendo el asunto de la atracción letal por foros relacionados con la muerte digna, digna y divertida, imagino. Coinciden mis lecturas con el cachivache de la muerte, pues ando enfrascado en un librito menudo, pequeño, peludo, suave, titulado "La tienda de los suicidas", de Jean Teulé. Es un divertimento ácido donde la familia Tuvache, dedicada a la venta de productos para el suicidio, horcas, modelos de sogas, venenos, armas y etcéteras anda preocupadísima porque su tercer hijo es vitalista, alegre y de risa fácil. Coincidencias negras: Urbonas podría trabajar perfectamente en la tienda de los Tuvache y yo, jò, debería de corregir mis preferencias informativas.