La amortización de la deuda de 900.000 euros que arrastra el Teatro Principal de Alicante será uno de los puntos más controvertidos en la próxima reunión de propietarios que se celebrará finalmente el día 14, aunque de forma telemática. El Ayuntamiento de Alicante ha convocado, eso sí, por videoconferencia, el Consejo de Gobierno, integrado también por el Banco Sabadell y la Generalitat, y posteriormente la Junta General, organismos que no se reunían desde septiembre de 2019.

Dejar las cuentas del teatro a cero pasaba por utilizar parte de los 3 millones pagados por la Generalitat para convertirse en propietario y, el resto, destinarlo a rehabilitación del teatro. El problema estriba en que cuando se firmó el contrato, en diciembre de 2018, el documento recoge que esa partida completa se emplearía en remodelar el edificio.

Casi dos años después, esa deuda sigue pendiente al no haberse solucionado ese escollo legal. Para intentarlo, el Ayuntamiento introdujo en el contrato una aclaración que incluía que la partida podría emplearse para «mejoras del teatro», algo que abría la puerta a que los 900.000 euros pasaran a la historia.

Sin embargo, según ha podido saber este periódico, uno de los tres propietarios no acepta esa variación en el concepto del documento. Si en la reunión del miércoles no se desbloquea esta postura, los 3 millones que pagó la Generalitat tendrán que destinarse íntegramente a reparaciones del edificio.

Cómo zanjar el déficit

El problema estaría en cómo hacer frente a los 900.000 euros de deuda. La respuesta pasaría por que cada propietario aportase 300.000 euros extra en un momento de crisis y, además, con un teatro que ha pasado por el cierre durante seis meses debido al coronavirus.

La Generalitat dejó claro cuando se sumó a la propiedad del Principal que adquiría sus participaciones dejando atrás el déficit anterior a su llegada, algo que no pasaría y que, además, le obligaría a aportar otro montante.

Lo que parece que tienen claro las tres partes es que el teatro necesita que se incremente la aportación anual, cifrada ahora en 140.000 cada propietario. El Institut Valencià de Cultura ya manifestó su intención de plantearlo en el Consejo. Sin embargo, habrá que esperar a ver la reacción en el caso de que haya que realizar un ingreso, y bastante grandes, extra.

El orden del día del Consejo de Gobierno y la Junta General incluye también la aprobación del ejercicio económico de 2019, así como la memoria artística y la programación para la temporada del próximo año. También se informará de la ejecución del presupuesto y el estado de la tesorería, después de este año tan anómalo y la gestión de las medidas adoptadas por el covid.