Pese a la imponente planta del Hotel Bali de Benidorm, un total de 257 atletas se animaron ayer a enfrentar sus 52 pisos, 924 escalones y 190 metros de desnivel en la decimotercera edición de la Subida Vertical Gran Hotel Bali, una prueba puntuable del circuito de la Towerrunning World Association.

El ganador en la categoría élite masculina fue el alemán Christian Riedl, actual número 3 del ranking de la competición, que invirtió para la escalada 4 minutos y 20 segundos, lo que batía el anterior récord de la competición (4' 33'') que estaba en posesión del español Ángel Llorens. El español finalizó en cuarto puesto en esta prueba. El líder de la clasificación, el polaco Piotr Lobodzinski, acabó segundo con un tiempo de 4 minutos y 28 segundos, también por debajo del antiguo récord de Llorens. El británico Stefan Stefina completó el podio.

En élite femenina el triunfo fue para la polaca Iwona Wicha (5' 55''), actual número 7 del ranking. Su compatriota Dominika Wisniewska-Ulfik, segunda en la clasificación, la siguió con un tiempo de 5' 56'', apenas un segundo más lenta. La italiana Cristina Bonacina, número 5 mundial, quedó tercera (6' 37''). La mejor española fue Neus Mas Manchón, que finalizó cuarta (6' 45'').

El equipo Towerrunning fue absoluto dominador de la prueba, ya que todos los atletas de los podios de ambas categorías forman parte de dicho club.

Las imágenes de los corredores, tirándose al suelo extenuados tras el imponente esfuerzo realizado, dan fe del tremendo desgaste que supone la subida, pese a que el tiempo invertido no supere en muchos casos los diez minutos.

Towerrunning

El campeonato de la Towerrunning World Association, que consta de subidas a rascacielos, torres y escaleras al aire libre, tiene lugar en numerosos puntos del globo, algunos de ellos tan carismáticos como el Empire State Building de Nueva York. El circuito mundial visita lugares como Francia, México, la República Checa, Singapur, China, Australia, Suiza, Alemania, Eslovaquia, Brasil o Gran Bretaña.

Este deporte requiere una preparación específica debido a la gran cantidad de fuerza explosiva que hay que mantener durante un periodo relativamente corto de tiempo. Los corredores requieren de un entrenamiento con gran énfasis en el tren inferior, particularmente en gemelos y cuádriceps, además de una considerable dosis de resistencia física, sin la cual sería poco menos que imposible completar algunas de las pruebas más severas. Hay que tener en cuenta que, pese a que el Gran Hotel Bali tiene «sólo» 924 escalones, algunas pruebas pasan holgadamente de los 2.000, como el Beijing Run en China (2.041), el Millenium Tower Run Up en Viena (2.529) y el Chicago Storm the Stadium estadounidense, que cuenta con la friolera de 3.000 escalones.

El ranking ha estado dominado los últimos años por el actual líder, el polaco Lobodzinski, en élite masculina, y por la australiana Suzanne Walsham, que en estos momentos ocupa la tercera posición en élite femenina. A nivel de países, Polonia es la mayor potencia internacional.