Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Un acuerdo que no se acaba de cerrar

El pleno del Ayuntamiento de Alicante aprobó en 2001 la cesión gratuita del derecho de superficie de varias parcelas en el polígono de Babel para que Coepa pudiera construir uno de sus proyectos más ambiciosos: el Centro de Formación en Prevención de Riesgos Laborales y Oficios. A partir de ahí, las instalaciones se fueron poniendo en marcha por fases, a medida que avanzaba la ejecución. Sin embargo, en septiembre de 2012 se canceló la actividad ante la imposibilidad de la patronal de afrontar los pagos. La asfixia económica era total. Las administraciones habían cerrado el grifo de las subvenciones, y tampoco ayudaba el sobredimensionamiento de la organización, que debía hacer frente a los gastos derivados del mantenimiento de tres edificios y a una plantilla formada por unos 80 empleados. Empezaba así una época de duros ajustes, con varios ERE de por medio, y las negociaciones para desprenderse de la sede de Ruperto Chapí y del centro de oficios. Entretanto, Coepa trasladó su sede a la calle Orense. Finalmente, el edificio situado frente al Teatro Principal de Alicante se vendió en agosto. Sin embargo, las conversaciones sobre las instalaciones de Babel siguen abiertas después de dos años. De hecho, la confederación tiene impagados unos 2,9 millones de euros por el préstamo del IVF, y la organización siempre ha mantenido que le resulta imposible hacer frente a las cuotas adeudadas. Por ello, lo que se planteó inicialmente, en lo que se configuró como un acuerdo a tres bandas entre Coepa, el Ayuntamiento y el Consell, era una dación en pago, por la que el edificio pasaría a la Administración local, que quería instalar allí unas dependencias de Atención Urbana, a cambio renunciar a una parte de la deuda del Consell. La cifra dependería de la tasación del edificio. Con ello, Coepa liquidaba su deuda con el IVF. Al final, parece que todo se frenó por el riesgo que se corría de tener que devolver las subvenciones recibidas de fondos sociales europeos y de la Generalitat si no se impartían cursos. Fue en este contexto en el que salió a la luz el interés de Fundesem, que buscaba una segunda sede para lanzar un programa de cursos prácticos para jóvenes no universitarios en situación de desempleo. Su propuesta no obtuvo respuesta. El último planteamiento, según admiten desde la Generalitat, es habilitar un centro pionero dependiente del Servef. Sin embargo, la cúpula de la patronal alicantina sostiene que, se adopte la decisión que se adopte, el inmueble tiene metros de sobra para que Coepa pueda seguir impartiendo ciclos, aunque esté el Servef.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats