El exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato se acogió a la amnistía fiscal en 2012 para regularizar su patrimonio y a raíz de ello la Agencia Tributaria comenzó a investigar un «complejo entramado societario familiar». Fruto de ese trabajo y ante la duda del origen de los bienes declarados, Hacienda incluyó a Rato en un listado de 705 personas sospechosas de haber podido blanquear capitales en la última amnistía fiscal y, a partir de ahí, es el Sepblac, la unidad de inteligencia financiera española, quien se encargó de la investigación. De esta forma, el patrimonio regularizado por Rato no estaría relacionado con sus actividades profesionales, sino que podría provenir de la herencia recibida tras la muerte de algunos miembros de su familia.

El exvicepresidente, sin embargo, aseguró ayer no tener constancia de la investigación. También negó tener sociedades en Gibraltar o Islas Vírgenes pero no quiso confirmar si se acogió o no a la amnistía fiscal.