El proyecto de empresa de la cadena de clínicas oftalmológicas fundadas por el doctor Jorge Alió, Vissum, después de que a finales del pasado mes de mayo el grupo escocés Optical Express, uno de los mayores del sector en Europa, se adjudicara la propiedad de la firma en una subasta que se había organizado para resolver el concurso de acreedores, tendrá que estar cerrado en unos quince días. De hecho, parece que así se acordó tras un encuentro mantenido en el juzgado entre las partes implicadas en la operación, para tratar de limar algunas tensiones y resolver flecos pendientes, sobre todo por lo que respecta a los locales, con el fin de que todo el proceso se cierre lo antes posible, según informaron fuentes próximas a la compañía, que, en cualquier caso, incidieron en que todo sigue adelante.

La compañía británica se hizo con la subasta de mayo al ofrecer 3 millones de euros en la puja y garantizar durante los próximos dos años el mantenimiento del 100% de la plantilla actual, compuesta por unas 230 personas. De ese importe, 2,8 millones de euros corresponden a la subrogación de la hipoteca del único local que Vissum tiene en propiedad, situado en la calle Francisco Silvela de Madrid, ya que el resto de instalaciones pertenecen a la sociedad patrimonial del doctor Alió, Clinvers Corporación 2002, de forma que se acordó seguir recibiendo una renta anual por ellas. Precisamente, la negociación en torno a esta cuestión parece que ha sido la que causó más controversias entre las partes, una cuestión que fuentes cercanas a la operación confirmaron que ya ha quedado solucionada en estos momentos.

En la subasta de mayo también participaron la consultora alicantina Atalanta Finvesta y el madrileño Grupo Arpada, propietario de diversas residencias geriátricas que concurrió a través de su filial inmobiliaria, Urtinsa.