Extremadura solicitará a Portugal que agilice la conexión por tren con Madrid

Extremadura mantiene todas las esperanzas en el mundial de fútbol 2030, que se celebrará entre España, Portugal y Marruecos, porque puede suponer la materialización de la infraestructura más demandada de la historia de la región: la conexión ferroviaria con Madrid con un tren de alta velocidad. Si se consigue para entonces, habrá llegado con más de tres décadas de retraso, pero supondrá un hito para los extremeños.

Esa unión entre Extremadura y Madrid se inserta dentro de un trazado más amplio a través del que se pretende conectar Lisboa con la capital de España en tres horas (ahora se tardan nueve). Es lo que se denomina corredor del sudoeste ibérico, una demanda también histórica. Sin embargo, para que se convierta en realidad es prioritario que el gobierno luso siga adelante con el proyecto, del que no se ha desarrollado nada aún. En este sentido la dimisión hace unos días del primer ministro portugués, António Costa, tras verse envuelto en un caso de corrupción que ahora se investiga, y la convocatoria de unas elecciones anticipadas para el próximo mes de marzo, pueden hacer peligrar esta aspiración. Ya ocurrió tras los comicios de 2011 que alzaron al gobierno a Pedro Pasos Coelho, quien decidió suspender el plan de la alta velocidad con Madrid para ahorrar costes.

No obstante la Junta de Extremadura duda de que vuelva a repetirse esa situación y que, si después de las elecciones de marzo hay un cambio en el ejecutivo luso, este vaya a decidir dar carpetazo otra vez al eje Madrid-Lisboa. Entre otras razones porque su construcción es una exigencia de la Unión Europea. "Las elecciones previstas a principios del año que viene no tienen por qué influir en estos proyectos", afirmó ayer el consejero de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Manuel Martín, en una entrevista concedida a Canal Extremadura Radio.

Solicitará una reunión

No obstante lo que sí hará la Junta de Extremadura, tal y como han confirmado fuentes de esta consejería a este diario, será instar a ese nuevo gobierno a que agilice los trámites para conseguir que esa conexión entre las dos capitales europeas sea una realidad cuanto antes. Para ello solicitará una reunión con el presidente y lo harán apoyándose en el foro del Corredor del Atlántico. Esta semana se ha celebrado un encuentro de este organismo en Bruselas. "Allí coincidimos con representantes de infraestructuras del gobierno portugués. Es ahí donde se revisan prioridades y plazos para todos los tramos incluidos en el corredor Atlántico de transporte y a través de este mecanismo también trasladamos estas peticiones", indican desde el departamento que dirige Manuel Martín.

Igual que la Unión Europea, la Junta de Extremadura mantiene 2030 como fecha límite para que ese trazado entre Lisboa y Madrid esté finalizado. De momento falta mucho por hacer. De hecho el tramo más avanzado es el que afecta a Extremadura, pues ya tiene terminada la primera fase de la electrificación, la que une Badajoz con Plasencia, a pesar de que todavía no se ha puesto en servicio. Y se ejecuta el siguiente trazado, que conecta Plasencia con Talayuela. Más allá de este municipio cacereño no hay nada. Tampoco en el terreno que afecta a Castilla-La Mancha, donde el estudio informativo se encuentra en evaluación ambiental y se trabaja para dar solución al paso de esta línea por Talavera y Toledo.

Mucho más al inicio se encuentra en la frontera portuguesa pues ni si quiera aquí se ha decidido aún el trazado que tendría el tren. El principal problema está en acordar el punto de acceso de las locomotoras: Lisboa tiene dos puentes (Vasco de Gama y 25 de Abril) pero a priori ninguno de ellos es válido, por lo que la solución pasaría por construir uno nuevo. Y eso es lo que le tocará decidir al nuevo gobierno que entre en acción a partir de marzo. 

La puesta en servicio de los trenes electrificados sigue aún sin fecha

Noviembre. Ese fue el compromiso (uno de muchos) del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana para poner en servicio el primer tramo de vías electrificadas en la región y que afecta a la conexión entre Badajoz y Plasencia. Las obras están ya concluidas, ya se han probado las catenarias y se está solo pendiente de que la agencia de seguridad ferroviaria dé su visto bueno para que puedan ponerse en tensión.

La documentación se entregó a este organismo, dependiente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), el 2 de noviembre, pero todavía no ha dado su consentimiento para que Extremadura estrene los primeros trenes electrificados. Tampoco desde Transportes se concreta una fecha para su puesta en funcionamiento, a pesar de que noviembre entra desde hoy en su segunda quincena. Este diario ha preguntado en varias ocasiones al ministerio y a Adif sobre este asunto y no ha recibido respuesta.

"En noviembre iba a entrar en servicio la línea electrificada y de momento no hay comunicación oficial. El mes pasado el secretario del Ministerio de Transportes, Movilidad y Vivienda adelantó que sería este mes y estamos en la última mitad de noviembre y no tenemos fecha exacta. Esperemos que sea pronto, cuanto antes", apuntó ayer el consejero de Infraestructuras de la Junta de Extremadura, Manuel Martín, en una entrevista en la radio pública autonómica.

La puesta en servicio de las catenarias entre Plasencia y Badajoz va a suponer ahorrar tiempo de viaje desde la capital pacense hasta Madrid (no se ha concretado en cuántos minutos descenderá el trayecto). Además de permitir que por primera vez circulen por las vías extremeñas trenes electrificados. Hasta ahora los convoyes utilizados son diésel.

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