Frustrado por la decepcionante derrota en casa ante el Sporting (0-1) y alentado por su victoria de prestigio en su última salida a Girona (0-2). Así, a la búsqueda de una identidad fiable y reconocible, viajó ayer en autobús el Elche para intentar una nueva sorpresa esta tarde (18.00) en Huesca ante otro rival «de campanillas», recién descendido y candidato casi por obligación y presupuesto al retorno a Primera. Aunque el técnico franjiverde José Rojo, Pacheta, recalca que son partidos y rivales «distintos», el Elche quiere reeditar en el difícil campo de El Alcoraz la gran versión que ofreció en Montilivi y en la jornada anterior en casa ante otro rival de enjundia, el Rayo Vallecano.
A punto de cumplirse el primer tercio de LaLiga Smartbank, el conjunto ilicitano necesita despejar dudas y ser más regular, menos inestable. En contra de la lógica, sus resultados son mucho mejores lejos del Martínez Valero, donde ha sumado 10 de sus 16 puntos. Una cifra que le mantiene en la zona media de la tabla, a tres de la promoción de ascenso y a cuatro del descenso.
No lo tienen fácil esta tarde los hombres de Pacheta, que se cruzan con el segundo mejor equipo de la Liga como local, sólo por detrás del líder Cádiz. El Huesca ha ganado cuatro de sus seis partidos en El Alcoraz -con un empate y una derrota- y es séptimo con 19 puntos. La victoria del Albacete sobre el Cádiz le sacó el viernes de la promoción.
Además de su fortaleza en casa, el equipo azulgrana cuenta en su plantilla con varios nombres ilustres con pasado en la máxima categoría como el exfranjiverde Pedro Mosquera, Mikel Rico (Athletic) o Luisinho (Deportivo). La nómina se completa, entre otros, con el delantero japonés Okazaki (Leicester, Stuttgart) y el atacante de La Fábrica madridista Cristo.
«El Huesca juega como un equipo grande», avisa Pacheta, que apura las opciones para que Gonzalo Verdú reaparezca esta tarde en el centro de la zaga si se recupera plenamente de sus molestias de rodilla. «Ellos juegan muy fácil; son el equipo que da más pases en zona 3 y nos va a hacer sufrir y correr mucho porque tiene muchísimos mecanismos en defensa y ataque y grandes jugadores», añade el técnico, que no cuenta por lesión con el lateral izquierdo Juan Cruz y dos de sus mediocentros, Mfulu y Folch. Va con lo justo Pacheta, que ha incluido en la lista al centrocampista canterano César Moreno.
Para intentar que el equipo de Míchel no se sienta cómodo en su fortín de El Alcoraz, Pacheta tiene claro que el Elche debe ajustar al máximo su presión en el campo contario «para luego tener el balón con fluidez y ser contundentes» en el área rival. «Necesitamos un partido casi perfecto para ganar», concede el preparador burgalés, sabedor de las limitaciones de su corta plantilla, que se ven agravadas por las lesiones y a la que le cuesta especialmente hacer gol -11 dianas en 12 partidos-, si bien es cierto que cada vez que el Elche ha marcado esta temporada, ha conseguido puntuar. Y a la inversa: los franjiverdes no vieron puerta en ninguna de sus cuatro derrotas ante el Sporting (0-1), Extremadura (2-0), Zaragoza (1-0) y Fuenlabrada (0-2).
En su nuevo desafío de altura para cerrar este exigente mes de octubre, el cuadro ilicitano se mide con el equipo que más pases da de la Liga, en el que no estarán por lesión Doukouré, Insua y Pedro López, ni Josué por sanción. «Todos son valiosos y más que nombres, todos tenemos que dar un pasito adelante para mejorar en algunos aspectos necesarios como conjunto», destacó el entrenador del Huesca Miguel Ángel Sánchez, Míchel, que prefirió habar de «evolución» antes que de «revolución» respecto a su «once» de hoy.
