Detenido por agredir con un cúter y robar 500 euros a la empleada de una agencia de viajes

La Policía Nacional detuvo el lunes a un hombre de 58 años acusado de agredir y robar en una agencia de viajes en la calle Conrado del Campo, en Elche. Los hechos se produjeron alrededor de las 18.15 horas cuando el arrestado entró en el establecimiento con la excusa de adquirir unos vuelos a Tánger. Al parecer, tan solo quería comprobar que la empleada se encontraba sola en el establecimiento, pues volvió minutos más tarde para perpetrar el robo. El acusado sacó un cúter y amenazó a la empleada, poniéndoselo en el vientre, mientras le pedía el bolso para robar su contenido.

En ese momento, la mujer cogió unas tijeras y trató de defenderse, por lo que se inició un fuerte forcejeo en el que el detenido la tiró al suelo, la cogió del cuello y acabó hiriéndola en un brazo, realizando un corte con la cuchilla.

El hombre también resultó herido en una mano por su propio cúter durante el forcejeo y, asustada, la empleada accedió a darle el bolso al verse lesionada y temer que el incidente pudiera pasar a mayores. Así, mientras el detenido registraba el local, la empleada logró encerrarse en un cuarto al fondo del establecimiento, para ponerse a salvo.

El presunto ladrón aprovechó entonces para registrar el local y robar la cartera de la empleada, en la que había cerca de 500 euros y tres décimos de la lotería de Navidad, según manifestó la propia víctima a los agentes de la Policía Nacional, que acudieron al lugar de los hechos tras recibir el aviso, una vez la mujer pudo pedir auxilio a los vecinos.

Además de la cartera, el hombre se llevó dos teléfonos móvil, uno de ellos de alta gama. Otro de los objetos sustraídos fue una caja de plástico que contenía cerca de 30 euros en efectivo.

La víctima pudo identificar al autor del delito tras mostrarle la Policía Nacional varias fotografías de personas que coincidían con la descripción que les facilitó: un hombre de unos 55 años, 170 centímetros de altura, y sin dientes. Tras la detección, los agentes se incautaron de parte de lo robado. Pudieron recuperar los teléfonos móviles y la caja de plástico, pero ni rastro del dinero ni de los décimos de lotería.