El mercado ruso se convirtió hace un par de años en un escenario interesante para el sector del calzado, después de que el volumen de zapatos exportados a Rusia anotase incrementos del 30% (30 millones de euros anuales). No obstante, en la actualidad el sector ha empezado a mirar a este país con incertidumbre, una vez que se espera que de cara al próximo verano los rusos sean más exigentes con la entrada a su país de productos como el calzado, al que se espera que se pida un nuevo etiquetado, entre otras cuestiones que aún están por determinar.
Desde la Federación de Industrias del Calzado Español (FICE) dicen que «somos conscientes de que en Rusia están trabajando en un proyecto piloto que afectará a la importación de productos, y desde el sector del calzado estamos expectantes a las novedades a las que tendrán que hacer frente las empresas a mediados de 2019».
Barreras técnicas como el etiquetado o la exigencia de ensayos en función del tipo de producto, se pueden sumar a otras de carácter aduanero y culturales como el idioma. Nuevos condicionantes hacia los que el sector español mira con interés para poder adaptarse con rapidez y seguir siendo competitivo en el mercado ruso.
Estudio
A esta situación se suma que la Unión Europea ha empezado a recabar información de las empresas para tratar de conocer cuáles son los principales obstáculos a los que se enfrenta la industria para vender su producto en Rusia.
Desde la UE sostienen que «Rusia es un gran mercado que ofrece oportunidades de negocios para empresas de calzado». Sin embargo, reconocen desde la UE, «acceder a este mercado puede ser un reto».
Para identificar los principales obstáculos prácticos para el comercio exterior con Rusia y ayudar a las empresas a superarlos, la Comisión Europea está realizando esta encuesta entre empresas que pueden enfrentar este tipo de desafíos, con énfasis en los requisitos técnicos para los productos y las normas de certificación.
Desde la patronal nacional destacan que «durante los últimos años Rusia se ha convertido en un mercado importante para el sector que demanda un producto de calidad, como el que se fabrica en España».
En este sentido, la presidenta de la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), Marián Cano, aseguró que «Rusia es un mercado con potencial que puede ser interesante para nuestro sector y que, de hecho, siguen de cerca nuestras empresas».
En la patronal valenciana del sector zapatero también consideran, según dijo Marián Cano, que «para favorecer el acceso a este mercado por parte de las empresas es importante que exista estabilidad política, de manera que se garanticen los tipos de cambio y en las políticas aduaneras».
Para el sector no pasa desapercibido el peso que el mercado ruso ha ido cobrando en los últimos tiempos. En relación a las exportaciones españolas de calzado, Rusia se ha situado en la decimotercera posición desde enero hasta septiembre de 2018, con una exportación de 1.276.312 pares que se ha traducido en más de 30,4 millones de euros en valor.
Datos
Aun siendo significativos estos datos, durante este periodo, el mercado ruso ha experimentado un descenso en las exportaciones del 1,15% en volumen y del 8,65% en valor.
