«Los usos de las viviendas tradicionales de los huertos en la zona Unesco han de ser aquellos relativos a los valores naturales y culturales de los huertos y del cultivo de la palmera datilera», así lo fija el anteproyecto de la Ley de Protección y Promoción del Palmeral de Elche, que el Consell anunció aprobaría este año, y que ayer el colectivo Volem Palmerar recordó para sacar los colores al equipo de gobierno al entender que la cesión de una casa tradicional que ha hecho hace unos días a la asociación de la Venida de la Virgen, en el Huerto de la Tía Casimira, no cumple ni de lejos este propósito. La zona Unesco figura en el anteproyecto como la más importante a proteger y es por ello que no se permita nada que no esté directamente relacionado con este patrimonio.
«Creemos que estas entidades pueden estar en otros espacios no tan sensibles y protegibles», dice el colectivo en un comunicado en el que se refiere también al anuncio que hizo el regidor, Carlos González, de ceder otra vivienda próximamente a entidades festeras en el Hort del Gat y que, entienden, también incumpliría la normativa por la que desde hace dos décadas, desde que se declaró el Palmeral Patrimonio de la Humanidad, suspira la ciudad para garantizar la protección de un bien único para la Unesco.
Para Volem Palmerar esta cesión demuestra el «escaso interés que observamos en el actual equipo de gobierno municipal del PSOE y Compromís en el respeto de aquellos usos tradicionales y del Palmeral», explican en un comunicado, en el que añade que «no solo está su tibia reacción a la inexplicable tardanza en aprobar una nueva Ley del Palmeral, que está favoreciendo proyectos negativos para el Palmeral, y que depende de una Conselleria que dirige Vicente Marzà, de Compromís, sino que está tomando decisiones que pueden hipotecar su futuro».
