Rescatados de las paredes del Gran Teatro, del Capitolio y de las muchas otras salas que fueron cerrando entre la década de los ochenta y noventa en Elche. Una treintena de carteles de cine han dado vida a una nueva exposición que dan una idea de todo lo que ha supuesto el séptimo arte para la ciudad.

El Centro Cultural de las Clarisas se ha convertido en el santuario de héroes y de heroínas cinematográficos de los años veinte y de las películas que marcaron a los ilicitanos en el siglo XX. Todo ello gracias a unos fondos que forman parte del Museo de Pusol y que ahora estarán visibles en el centro de la ciudad hasta el 31 de enero.

La colección refleja, tal y como explica Rafael Martínez, director de la Fundación Proyecto Pusol, «todo lo que ha supuesto el cine en las décadas centrales del siglo XX como un espectáculo de evasión en una sociedad que había poco más que fútbol y toros en este país».

Algunos de los carteles que conforman la exposición inaugurada ayer en la sala cultural de las Clarisas. | ANTONIO AMORÓS

Con la muestra es posible conocer de cerca esa afición de los ilicitanos desde la apertura del primer cine en los primeros meses de 1897 con el teatro Llorente, el mismo año que se descubrió la Dama de Elche. El Kursaal se inauguró en 1920 en la Glorieta y después de la Guerra Civil pasó a llamarse Gran Teatro, donde se proyectaron las cintas más taquilleras, junto al Llorente. Después llegó el primer cine de las pedanías, el de Torrellano y el segundo cine urbano fue el Coliseum, en la calle Corredora. La primera sala de barrio fue el Ideal, dedicado a reestrenos y programas dobles. Después vendrían el Victoria, el Central y ya en 1949 el Capitolio. El cine Altamira fue una de las últimas salas, al igual que el Alcázar.

Todas las pedanías, según se cuenta en la exposición, tuvieron cines y fue a partir de 1970 cuando comenzó el declive que acabó con el cierre de las últimas salas clásicas a comienzos de siglo.

No solo eso enseña la exposición, también es posible conocer la importancia del cartel en la industria del cine como elemento comunicativo para atraer a las masas. La colección se divide en pequeños apartados temáticos. Como ejemplo, se pueden ver las estrellas de la época protagonizando los carteles.

Un santuario del cine en las Clarisas

«Al principio el cine está muy ligado a otras artes, como las escénicas y suelen ser cantantes, luego empezaron a protagonizar películas y así surgieron las primeras estrellas, como Imperio Argentina», explican los comisarios de la muestra que se expone en la sala cultural de las Clarisas, José Aniorte y Borja Guilló.

Evolución

La exposición exhibe una selección de la numerosa cartelería que se conserva, en su mayoría del Gran Teatro. Estos fondos se muestran por primera vez de manera conjunta para crear un importante conjunto por la belleza y peculiaridad de las obras.

La muestra se articula en torno a estos carteles, pero desarrolla en su discurso la importancia que tuvo el cine como entretenimiento y como industria desde su etapa muda hasta la explosión del sonoro a nivel internacional.

La edil de Cultura, Marga Antón, aseguró que se trata de una «exposición de lo más interesante al poder disfrutar una treintena de carteles originales del siglo anterior en la que también se hace un guiño a todos los cines del municipio».