Casi ocho meses han pasado ya desde el inicio de esta crisis sanitaria que ha sumido al mundo en una situación de excepcionalidad y máxima exigencia sanitaria. El trabajo realizado por los Colegios Profesionales de la provincia ha sido sobresaliente, desde el primero hasta el último, asesorando a sus colegiados para que pudiesen trabajar de la manera más eficiente posible y dar ese servicio, tan necesario en estos momentos de incertidumbre, a una ciudadanía desorientada y ávida de información veraz y contrastada.
Dentro de este colectivo al que represento como Presidenta del Colegio Oficial de Farmacéuticos de la Provincia de Alicante, permítanme que muestre mi orgullo profesional y destaque la labor del sector farmacéutico. Todos y cada uno de los muchos eslabones de la cadena farmacéutica ya que, aunque la profesión siempre se relaciona con la oficina de farmacia, —que es nuestra faceta más conocida— esta gran profesión tiene muchísimas vertientes: farmacéuticos de hospital, de la industria, de la distribución, de atención primaria, de prisiones o farmacia militar, han respondido de manera sobresaliente a las nuevas necesidades existentes.
“La farmacia prestó asistencia a más de 30 millones de personas en España solo en el primer mes de confinamiento”
Si ha habido un establecimiento que ha vivido en primera persona los peores momentos de la pandemia, ese ha sido la farmacia. Se calcula que en España prestó asistencia a más de 30 millones de personas solo en el primer mes de confinamiento. Además, 2,2 millones de los españoles han recibido atención telefónica por parte de su farmacéutico y 850.000 ciudadanos han recibido atención farmacéutica en su domicilio, especialmente mayores de 65 años.
En estos duros meses la labor del farmacéutico ha sido vital, ayudando a rebajar la presión sanitaria sobre los centros de atención primaria, estando al lado de las personas, ayudándolas y asesorándolas. Desde las farmacias se ha potenciado la comunicación con los centros de salud, se han organizado citas, llamadas telefónicas, se han recomendado medicamentos alternativos que no necesitaran receta médica, hemos sido consejeros, hemos hecho reparto a domicilio de los medicamentos, hemos estados, más que nunca, “unidos por tu salud” y al lado del paciente cuando más nos necesitaba.
“Desde las farmacias se ha potenciado la comunicación con los centros de salud, se han organizado citas, llamadas telefónicas, se han recomendado medicamentos alternativos que no necesitaran receta médica”
Son datos que reflejan la gran labor desempeñada por mis compañeros y desde aquí quiero volver a recalcar la mano tendida que siempre tendrá este colectivo hacia para con las instituciones, con el claro objetivo de ayudar a la ciudadanía en las situaciones que se nos presentarán en el futuro y que seguro, juntos, superaremos.
