El entrenador del Hércules, Manolo Herrero, ha reconocido sentir "rabia" por los puntos que se ha dejado su equipo por el camino al recibir goles en acciones a balón parado, en las que ha hecho hincapié en el entrenamiento de hoy. Herrero ha apuntado que durante la semana le ha dado vueltas a los problemas que está teniendo el equipo en las jugadas de estrategia y ha visto vídeos y trabajado con la plantilla para evitar que vuelvan a suceder. "No defender bien la estrategia nos ha costado cuatro puntos en los dos últimos partidos", ha lamentado el técnico, en referencia a los empates cosechados frente al Olímpic de Xàtiva y el Cornellá.

El preparador andaluz ha incidido en que han trabajado las acciones a balón parado "para, llegado el momento, prestar toda la atención posible", pero ha matizado que al final se trata de una cuestión de concentración. El técnico ha apuntado que los tres empates consecutivos que ha encadenado el Hércules le "obliga a conseguir una victoria" este domingo ante la Pobla de Mafumet, y ha añadido que deben pensar que juegan contra el filial del Nàstic de Tarragona, "con buenos jugadores y uno de los clubes que mejor juegan a fútbol". "Es un equipo que está mejorando en el día a día, que empezó un poco dubitativo pero que se va asentando", ha explicado Herrero, que ha reconocido ser afín a la filosofía de juego del conjunto tarraconense.

Respecto al futbolista David González, que podría regresar al Hércules en el mercado de invierno, Herrero se ha limitado a decir que no es algo que le preocupe porque debe centrarse en lo que tiene. En este sentido, se ha referido al centrocampista Carlos Indiano, a quien se apunta como posible damnificado si llega otro jugador en su posición al ser el que menos minutos ha disfrutado en lo que va de Liga. "Lo veo fastidiado, es normal. No lo sería que estuviera contento y feliz. Ha tenido la desgracia de que los jugadores de su zona no han tenido problemas físicos, y no puedo negar que he tenido más confianza en sus compañeros que en él", ha concluido Herrero.