Su carrera acaba de empezar. Apenas suma 44 partidos, todos por debajo de la Segunda División. La apuesta de Carmelo del Pozo por su continuidad es una muestra de la confianza del director deportivo en su crecimiento profesional. Inició el curso como titular hasta que un error de cálculo en Alzira le sacó del once. Como otros compañeros en su situación, Carlos David sin ir más lejos, fue capaz de asumir la pérdida de notoriedad sin bajar un ápice su predisposición al trabajo semanal. La lesión en el pie de Jesús Fernández en el primero de los últimos seis triunfos consecutivos, le devolvió a la portería. Desde entonces, el Hércules ha sumado de tres en tres, solo ha encajado tres tantos y ha dejado su portería a cero dos veces.
El guardameta catalán ha contribuido activamente a ello. Ha detenido un penalti, en Melilla, y ha mostrado la misma seguridad que exhibió en verano y que le valió para arrancar por delante de su compañero Jesús Fernández en la rotación. Sin embargo, con 23 años, su margen de mejora es grande. Su punto flaco: las salidas para despejar o bloquear balones aéreos. Frente al Marchamalo, en La Solana, tuvo dos fallos de este perfil y, lejos de escudarse en el viento, los asume con entereza como propios.
«Todo influye, es verdad, pero fueron errores personales. Mis compañeros estuvieron atentos y me ayudaron a subsanarlos. Todo el mundo falla, tengo que convivir con el error, pero es evidente que debo mejorar algunos aspectos de mi juego. Lo importante, en todo caso, es que el equipo no acusó mis fallos y sumamos los tres puntos», reconoce Adrián López en un honroso ejercicio de sinceridad y autocrítica.
El portero del Hércules considera que el asalto al liderato y la obtención del título honorífico de campeón de invierno es muy buena señal, pero le restó trascendencia por la altura de temporada a la que han llegado ambos logros. «Valoramos mucho el liderato, porque nos ha costado mucho llegar aquí. Es un paso importante, que nos hace muy felices, pero no hemos hecho nada aún», indicó el joven cancerbero.
«Estamos jugando mejor y hemos entrado en una buena dinámica, pero no podemos confiarnos porque en dos semanas tenemos otro partido muy difícil ante el filial del Granada y hay que seguir ganando». Adri López aseguró que el vestuario es consciente de que queda un camino largo hacia el ascenso. «Loo conseguido hasta ahora no vale de nada. Está todo muy apretado y hay que ganar todos los partidos que podamos. Estoy convencido de que en la segunda vuelta podemos hacer mejores números aún».
