Fuegos sin precedentes

¿Qué ha causado los incendios de Hawái y por qué están provocando tantos estragos?

El fuego que ha devorado parte de la isla de Hawái y Maui, los dos mayores territorios del Estado, es ya una de las peores catástrofes naturales de su historia

Incendios en Hawai.

Incendios en Hawai.

Carles Planas Bou

La isla de Maui, en Hawái, ha quedado reducida a humo y ceniza. Este martes, el pequeño pueblo de Lahaina sufrió pequeños incendios de matorrales que, avivados por las temperaturas y el viento, se han propagado durante la semana hasta arrasar gran parte del territorio insular. Al menos 55 personas han muerto en el que ya es el incendio forestal más mortífero que ha vivido Estados Unidos desde 2018, cuando el fuego engulló la localidad de Paradise, en California. Cientos de otras personas están desaparecidas, según las fuentes oficiales.

El archipiélago de Hawái, compuesto por 137 islas, no es ajeno a los incendios. Sin embargo, el que ha devorado parte de la isla de Hawái y Maui, los dos mayores territorios del Estado, es ya una de las peores catástrofes naturales de su historia. Aunque los bomberos han logrado contener la mayoría de los focos de fuego, se espera que el número de víctimas mortales aumente durante las próximas horas, cuando los equipos de rescate puedan acceder a las zonas hasta ahora bloqueadas por las llamas.

Incendios en Hawai.

Incendios en Hawai.

"En 1960, tuvimos 61 víctimas mortales cuando una gran ola atravesó la Isla Grande", explicó este jueves el gobernador del estado, Josh Green, en declaraciones a la CNN. Se refiere al tsunami que golpeó a la isla de Hawái hace 63 años como resultado del terremoto de 9,5 grados que 15 horas antes había sacudido el suroeste de Chile, el mayor seísmo jamás registrado. "Esta vez, es muy probable que nuestro total de muertos supere significativamente esa cifra".

Efecto del cambio climático

El Gobierno hawaiano aún está investigando qué causó el primer fuego en Lahaina que ha terminado extendiéndose por la isla, quemándolo todo a su paso y obligando a decretar el estado de emergencia. Las llamas pillaron por sorpresa a los habitantes de la localidad costera y muchos terminaron lanzándose al océano para protegerse. Más de 14.000 personas (a las que estaba previsto que se sumaran 14.500 más) han tenido que ser evacuadas en un incendio que ha calcinado 1.000 hectáreas y ha destruido 1.700 edificios, además de dejar a gran parte de la población incomunicada. Importante patrimonio histórico de Lahaina, antigua capital del reino de Hawái, ha quedado carbonizado.

Edificaciones destruidas por el fuego.

Edificaciones destruidas por el fuego.

Todo apunta a que se debe a una peligrosa combinación de condiciones meteorológicas exacerbadas por el cambio climático, según ha explicado Robert Bohlin, de la oficina del Servicio Meteorológico Nacional (NWS) en Honolulú, a 'Scientific American'. Antes de que se declarasen los incendios, Maui ya estaba en alerta roja debido a las altas temperaturas y a la sequía que sufre la isla. Los expertos advirtieron en julio de que "el riesgo de incendios durante la estación seca de este año es elevado". A eso se le suman los vientos huracanados que el martes avivaron las llamas.

"Nunca habíamos experimentado un incendio forestal que afectara a una ciudad de esta manera", aseguró Green. El gobernador hawaiano remarcó que los desafíos del calentamiento global están ejerciendo una presión sin precedentes sobre el archipiélago, agravando las condiciones de calor extremo que permiten que el fuego se propague con mayor rapidez. "Por primera vez estamos viendo esto en muchas partes diferentes del mundo".

Sequía y viento

Los científicos han señalado que un factor clave para entender estos incendios son las condiciones anormalmente secas que afectan al 80% de Hawái, según datos del US Drought Monitor. Casi el 16% del condado de Maui estaba afectado por una sequía grave este martes, día en que se detectó el primer incendio, un aumento del 5% respecto a la semana anterior.

Además de la baja humedad, los expertos también han apuntado a que algunas zonas de las islas hawaianas están cubiertas de hierbas no autóctonas que son más inflamables que la flora tradicional del paradisíaco estado insular.

Este martes, el huracán Dora, una tormenta de categoría 4, pasó por la costa de Hawái. Sus fuertes rachas de viento –de entre 48 y hasta 97 kilómetros por hora– habrían contribuido a propagar las llamas desde la pequeña localidad costera de Lahaina, al noroeste de la isla, a otros rincones de su verde territorio. Esas corrientes huracanadas han dificultado la respuesta de los bomberos. "El fuego puede estar a una milla (1,6 kms) o más de tu casa, pero en un minuto o dos, puede estar en tu casa", ha explicado su jefe adjunto en Maui, Jeff Giesea.

En el pasado, los incendios forestales eran poco habituales en Hawái. Según los registros, se originaban a causa de rayos o de las erupciones de los volcanes que habitan las islas del archipiélago. Sin embargo, el aumento de las temperaturas, la disminución de las lluvias y la actividad humana han hecho que los fuegos sean cada vez más comunes y extremos. En agosto de 2018, hace cinco años, Lahaina vivió un episodio similar. Dos pequeños incendios se vieron magnificados por los vientos del huracán Lane y terminaron devorando 31 vehículos y 21 viviendas. Fue el peor que había sufrido Maui. Hasta ahora.