El auditorio de Teulada no es el cuento de nunca acabar, sino la cuenta de nunca acabar. Las obras las adjudicó en 2006 José Císcar, que todavía era alcalde (dimitió en 2009 e inició la meteórica carrera que lo ha llevado a la vicepresidencia del Consell) por algo más de 5 millones de euros. Pero, al final, levantar el edificio, diseñado por el prestigioso arquitecto Francisco Mangado, costó 10,3 millones. Ahora ha llegado otra sentencia que todavía eleva un poco más la factura. El juzgado contencioso-administrativo número 4 de Alicante ha dado la razón a la empresa Mangado y Asociados, S. L. Esta mercantil, del arquitecto que diseñó el auditorio, reclamaba los honorarios que correspondían al primer proyecto modificado. La sentencia condena al ayuntamiento a abonarle 76.938 euros.

El arquitecto cobró por el contrato para la asistencia técnica, la redacción de proyectos y la dirección de obra 314.459 euros (así consta en la sentencia). Esos emolumentos se calcularon sobre el precio del primer proyecto, que subía a 5,8 millones de euros. Pero se modificó y «finalmente la obra fue liquidada por la cantidad de 6.451.986 euros», precisa el fallo.

Mientras que el arquitecto reclamaba el porcentaje de honorarios que correspondían a ese incremento de presupuesto, el consistorio sostenía que el proyecto inicial se modificó por «las imprecisiones técnicas y errores imputables» a Mangado. El juez considera que la alusión a los «presuntos errores» es «gratuita», ya que el consistorio no aporta pruebas. Precisa que no hay ningún informe que acredite esos fallos en el diseño del proyecto.

Al menos el Ayuntamiento se salva de pagar los intereses de demora que también pedía la empresa del arquitecto navarro.