La celebración del Día Internacional de la Salud Mental se presenta este año en Elche con una buena noticia: la Asociación de Familiares de Enfermos Mentales de Elche y Comarca, ASFEME, dispondrá muy pronto de unas magníficas instalaciones, construidas por la Generalitat con una inversión cercana a tres millones de euros, que se pondrán en marcha paulatinamente, y que permitirán mejorar y ampliar los servicios que esta entidad presta ahora a las personas con enfermedad mental. Un recurso que se suma a los que ya existen en nuestra ciudad, como las dos viviendas tuteladas que también dirige ASFEME, o el Centro de Rehabilitación e Inserción Social de Enfermos Mentales Crónicos que gestiona el Ayuntamiento de Elche. Las asociaciones de familias desarrollan una tarea fundamental en la atención e integración social de las personas con enfermedad mental, que merece el apoyo de todos los poderes públicos. Nos encontramos en una época de crisis económica y de graves dificultades financieras para las Administraciones públicas, pero hay que evitar la merma en la atención a los que más lo necesitan. Este es, desde luego, el sentir del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Elche, y por ello hemos seguido colaborando económicamente con las asociaciones de personas con discapacidad y sus familias, entre las que se encuentra ASFEME, y vamos a seguir haciéndolo. Porque, además, la incidencia de la enfermedad mental está creciendo, por desgracia, a pasos veloces. Las enfermedades mentales representan hoy el 12% del total de las patologías. Y un 15% de las discapacidades están motivadas por la enfermedad mental. Son particularmente frecuentes las depresiones y los trastornos de ansiedad, vinculados en muchas ocasiones a una dificultad de adaptación frente a acontecimientos vitales estresantes, como el desempleo, problemas de pareja o de incomunicación familiar, agotamiento emocional por estrés laboral o por el cuidado de enfermos crónicos, etc. Estas enfermedades son causa frecuente de bajas laborales, y provocan una significativa pérdida de horas de trabajo. También se ha incrementado la incidencia de los trastornos mentales graves, como la esquizofrenia o el trastorno bipolar.

El Día de la Salud Mental quiere sobre todo transmitir a la sociedad un mensaje principal: nos llama a superar el estigma y la discriminación que continúan sufriendo todavía las personas con enfermedad mental. Quiere transmitir la conciencia de que, como todas las personas con cualquier tipo de discapacidad, las personas con enfermedad mental son personas iguales a nosotros, con los mismos derechos, y que han de disfrutar de las mismas oportunidades, participando en la corriente normal y común de la vida social sin segregación alguna. Hemos de promover pues la plena participación social de las personas con enfermedad mental, a través de vehículos tan diversos como la cultura o el deporte. Pero sobre todo a través del principal cauce de integración social: el empleo. Hemos de impulsar nuevas oportunidades de empleo para todas las personas con discapacidad, y concretamente para las personas con enfermedad mental. La reciente incorporación de ASFEME al Consorcio del Pacto Local por el Empleo del Ayuntamiento de Elche obedece también a esa preocupación.

Asimismo, este día internacional quiere concienciar a la sociedad acerca de la conveniencia de una eficaz prevención y así lo pone de relieve el lema elegido el presente año: "La mejor inversión, tu salud mental". Conducir una vida saludable, en la que haya un adecuado equilibrio entre el tiempo dedicado al trabajo, a la familia y al esparcimiento; la práctica del deporte; tener capacidad de respuesta ante los problemas de la vida; y acudir al médico siempre que se detecten síntomas de estrés, agotamiento o inestabilidad emocional son algunas pautas de conducta que pueden contribuir a la prevención de la enfermedad mental. Es especialmente relevante la prevención en la escuela, que puede permitir detectar de forma temprana síntomas de anomalía o trastorno mental en los niños y también en sus familias. La labor de los maestros y profesores, apoyados por los gabinetes psicopedagógicos de los centros educativos, tiene en este campo una importancia crucial. Cabe mencionar, asimismo, los programas de detección precoz de la psicosis incipiente, que se están llevando a cabo desde las unidades de Salud Mental de los centros de salud.

Finalmente, para la prevención de la enfermedad mental es también una eficaz ayuda el trabajo en la comunidad. Es un buen ejemplo -que habremos de tratar de repetir- el Proyecto de Intervención Comunitaria Intercultural que promueve el Ayuntamiento de Elche en el barrio de Carrús, en colaboración con la Caixa y la Fundación Elche Acoge.

Pero, desde luego, la tarea más importante la realizan las asociaciones de personas con enfermedad mental y sus familias. Por ello, quiero aprovechar la celebración, hoy, del Día Internacional de la Salud Mental, para felicitar públicamente a ASFEME por la excelente labor que desarrolla en Elche y en toda nuestra comarca.