Síguenos en redes sociales:

El cartógrafo

EL CHISPAZO DE LA VIDA

No terminé de comprender por qué la primera marca mundial de refrescos había elegido al Atlético de Madrid para su nueva campaña publicitaria y mucho menos que comenzara a emitir el anuncio antes de saberse si el Atlético había roto el maleficio o conservaba su tradicional apego a las catástrofes. Aquello podía enemistar con la marca a los aficionados de otros equipos y traumatizar al niño que confiesa a su padre en el anuncio que se ha hecho del Atlético de Madrid. Pasean por un parque y el «cherchez la femme» irrumpe en escena cuando una niña con la camiseta colchonera invita al protagonista a jugar un partidillo. Como todo era demasiado angelical y sospechosamente idílico, supe que algo iba a ocurrir. Bien, hoy la compañía ha retirado el anuncio al descubrir que el actor que encarna al padre es un simpatizante abertzale que entre trago y trago de refresco exige la liberación de los presos etarras. Qué manera de palmar.

EXIGENCIAS DEL GUIÓN

Esta es la campaña electoral más divertida que recuerdo desde que Fraga desalojó en un mitin a unos reventadores auxiliado por una periodista embarazada y un caballero legionario mutilado. La tangente machista del debate Arias-Valenciano ha diluido el momento en que él presume de haber preparado concienzudamente el debate y lo dice leyendo la frase en uno de sus dos mil folios. A partir de ahí, todo ha sido un plano-secuencia de Berlanga con diálogos de Azcona. Por ejemplo, los socialistas convocan en Barcelona al candidato alemán y al primer ministro francés para una sesión de espiritismo que ahuyente los recortes. Sin embargo, el partido del candidato alemán gobierna en coalición con la maléfica Merkel y el gobierno francés acaba de aprobar un recorte de 50.000 millones de gasto. Rajoy es un manirroto comparado con él. Remata la levitación colectiva una eufórica Elena Valenciano: «España necesita girar a la izquierda». Y los otros dos se han mirado sin saber a quién se refería.

CUL DE SAC

Viendo las escenas en que el vehículo de Montoro intenta escapar de unos manifestantes regresa la lírica del pastor Niemöller, que erróneamente se atribuye a Brecht, acerca de que tarde o temprano el timbre también sonará de madrugada en casa de los indiferentes ante la desgracia ajena. Pere Navarro, un señor elegido para presidir las honras fúnebres del PSC, lo comprobó hace unas semanas y en cuanto Artur Mas refrene su deambular histérico por el páramo de la secesión los radicales echarán abajo el portalón de su masía. Pero no es un fenómeno catalán sino tan folclórico como el cuponazo o los nazarenos que se ha incorporado a la liturgia política hasta convertir en gestos heroicos dar una conferencia en cualquier universidad o repartir propaganda por la calle. Demasiados años mirando al techo mientras las macetas caían sobre los otros, jaleando a gamberretes por aquello de que la juventud es impulsiva o disculpando exhibiciones populacheras de matonismo.

UNAS PALABRAS DE MÁS

Una presentadora retoma las declaraciones del alcalde de Sestao de hace unos días sobre los extranjeros en las que amagaba con expulsarlos de la ciudad cubiertos de brea y plumas como en el lejano oeste. El alcalde matizó horas después que se refería a los extranjeros que delinquen habitualmente, mientras que los vecinos entrevistados describían un escenario callejero poco recomendable. Pero la llama ha prendido por aquello de que las campañas electorales resisten cualquier comedia y el alcalde rectifica hoy otro ápice reuniéndose con una delegación de subsaharianos que parecen razonablemente satisfechos auqnue no hayan entendido una palabra. De no amainar la galerna, supongo que al alcalde sólo le quedará pedir la doble nacionalidad como gesto de concordia o ser él quien se marche de Sestao.

LA TRIBU

Reflexión densa del patricio González-Pons sobre la Comunidad Valenciana: «Hemos hecho mal algunas cosas, pero pusimos a Valencia en el mapa». El cartógrafo Pons olvida que Crimea o Siria también han aparecido recientemente en el mapa y sin duda los implicados preferirían haber seguido en el anonimato. Ahora bien, si se trata de adquirir notoriedad a riesgo de algunas menudencias penales, hoy González-Pons tiene motivos para remachar el argumento: la jefa de comunicación de Fabra ha dimitido al ser imputada en el sumario de Canal 9, aquella cadena pública cuyos gestores parecen haber hecho honor a su programa emblemático, «A guanyar dinés». Ocurre al día siguiente de que Rajoy fuera agasajado en Valencia por el simpático Alfonso Rus («Hostia, Miguel, que bien estás en la foto», halagó al candidato en su intervención), la mucho más simpática Rita Barberá (la única política de España que no había oído hablar de Noos) y el presidente Fabra, de quien ahora sabemos que tenía una política de comunicación gracias a que su responsable ha dimitido. Colofón de Rajoy: «España va a crecer más que Alemania». Y ganaremos el Mundial, Mariano.

Pulsa para ver más contenido para ti