Siempre les quedará el recurso de echarle la culpa director del CIS, José Félix Tezanos, porque es afiliado al PSOE, aunque además sea un profesional competente e intachable. Los resultados del primer barómetro del CIS en enero de este año tienen una primera conclusión: suben en intención de voto todos aquellos partidos que se han mostrado dialogantes y dispuestos a llegar a acuerdos con los adversarios y salir de la situación de provisionalidad.

El barómetro fue realizado entre el 2 y el 13 de enero. Hay que recordar que el año terminó con el acuerdo programático entre el PSOE y Unidas Podemos. Ya habían hecho pública su voluntad de crear un Gobierno de coalición a los dos días de las elecciones. Tras casi dos meses de negociaciones, el presidente del Gobierno fue elegido el día 7 de enero en segunda votación por dos votos de diferencia y con la abstención de Esquerra Republicana de Catalunya y de EH Bildu. Según el CIS, coincide que todos los partidos que contribuyeron a la elección del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, suben en intención de voto, y en el voto estimado -tras pasar por la «cocina»- del CIS, con relación a las pasadas elecciones. El PSOE obtendría el 30,4% un 2,4% más que en las generales. Lo mismo le sucede a Unidas Podemos y sus confluencias incluido Compromís, que pasaría a ser la tercera fuerza más votada por delante de Vox y de Ciudadanos. En mi opinión, esta es la conclusión más importante del estudio del CIS: la gente premia con su intención de voto a quienes hicieron lo posible por desatascar la situación de provisionalidad. La gente parece tener bastante claro lo que quiere.

La encuesta tiene tres partes muy definidas: la situación y la problemática actual, las perspectivas electorales y la opinión sobre la reunión en Madrid de la Conferencia de la ONU sobre el cambio climático. Además, el CIS se decanta por una «cocina», la V-108, esa es su metodología para la estimación de voto, ya no va a dar solo los resultados en bruto. Tras el «diseño y prueba de nuevos modelos estadísticos» este se presenta como el «más robusto» y por eso empieza a aplicarlo al comienzo del año en este barómetro. La primera parte de la encuesta se refiere a la valoración que los españoles hacen de la situación y de las perspectivas económica y política en general de España y también personal. La situación de España se considera mala o muy mala, aunque hay mucha diferencia con la valoración de la situación personal que en general es bastante más optimista y, tanto en un caso como en otro, ha mejorado y se confía en que seguirá mejorando en el próximo año, tanto la situación de España como la personal.

Cuando se habla de los problemas de España, en primer lugar, sigue estando el paro seguido de la situación económica y de los aspectos políticos. Antes, en segundo lugar, estaban como problema «los partidos, los políticos y los problemas políticos». En el cuestionario actual se distingue ya entre los problemas políticos y el mal comportamiento de algunos políticos y los partidos. Los dos primeros figuran en tercero y cuarto lugar entre los principales problemas de España, pero a cierta distancia del primero y segundo que siguen siendo: el paro y los problemas económicos. Es importante señalar que cuando se pregunta por los problemas que «a usted personalmente le afectan más» el orden se invierte. El primer tema de preocupación son los problemas de índole económica, seguidos del paro para más del 25 % de la población. Les siguen, con entre un 10 y un 20%, la preocupación por la calidad del empleo, la sanidad, las pensiones, la educación y los problemas en general de índole social, y a distancia aparecen los problemas políticos. La conclusión es clara: los ciudadanos premian a quienes contribuyen a desatascar la situación de provisionalidad y se ocupan de los problemas que les afectan.

Tanto en intención, estimación de voto, valoración de líderes o en las preferencias sobre qué partido debe formar Gobierno, el más castigado es Vox seguido del Partido Popular y por último Cs qué sube ligeramente con relación al sondeo de diciembre, aunque baja, con relación a los resultados electorales de noviembre. La proliferación de demandas judiciales no parece dar resultado. «¡Pleitos tengas y los ganes!», sigue siendo una maldición. O, como decía Paco Rabal, de torero, para la afición: «¡Tomo nota!».