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Vicente Magro Servet

La otra vida en el metaverso

Imagen del metaverso

Mucho se está hablando hoy en día de la existencia del metaverso. Sí, esa realidad paralela a la auténtica en la que vivimos y que desde hace algunos años se está creando para programas de entretenimiento en el que el usuario se introduce en un “mundo espejo” con su propio “yo” o “avatar” con sus mismos rasgos físicos y personalidad. Muchas empresas tecnológicas ya están dando pasos avanzados para crear ese mundo virtual en el que las personas podrán introducirse por un programa informático que crea un mundo semejante al que vivimos.

Desde luego, esto no es nuevo, porque ya lo creó en su momento Neal Stephenson en su novela Snow Crash publicada en 1992. Es decir, que una novela de ciencia ficción que 30 años después, nada menos, empieza a implantarse en una posibilidad de la que todo el mundo habla en la actualidad como una especie de proyección de nuestra vida en un mundo irreal. Hay que señalar que se está utilizando mucho el metaverso en distintos campos, pero, sobre todo, en el de entretenimiento, donde tiene una aplicación muy relevante para introducirse en una realidad virtual cuyo principal exponente ha sido Second life, que es una Comunidad Virtual lanzada en junio de 2003, y que es la primera que ha proyectado esta realidad virtual, pero que no será la única, porque muchos sectores están ya trabajando en explotar este mundo paralelo, que actuaría como espejo al nuestro y en donde las empresas han visto ya un gran potencial en la publicidad, economía digital y muchos sectores que lo ven como un campo a explorar y explotar.

Sin embargo, si bien puede tener muchos aspectos positivos al poder ser utilizado como campo de proyección de productos y experimentos los peligros que lleva aparejados son muchos si los usuarios no son conscientes de cuando actúan en la realidad física y/o lo hacen en la virtual, ya que este escenario tan atractivo de experimentar con avatares que experimenten “al otro lado” puede llevar a alguna persona a no diferenciar su identidad de su avatar. Por ello, las prevenciones en este campo de la realidad virtual y los controles de quien debe estar alerta de lo que se realiza en el metaverso es fundamental. Y ello, porque igual que puede ser positivo el metaverso para mejorar nuestra sociedad puede serlo de negativo, habida cuenta que quien tiene entre sus objetivos actuar en la ilicitud encontrará en este sistema otra vía para continuar con su actividad delictiva. De ahí que ya se esté hablando del delito en el metaverso, sus consecuencias y cómo actuar contra ello.

El problema que existe con esta realidad virtual, sin embargo, es que podría darse la circunstancia de que los que intervienen en esa realidad virtual no distingan la diferencia entre esta y la realidad física, trasladando en algunos casos a la última cuestiones de la virtual, e incluso actuaciones delictivas reales considerando que se encuentra en la virtual. Este es el peligro de la delincuencia en el metaverso, en el sentido de que se traslade a la realidad verdadera y presencial lo que ha vivido en la virtual, o por cuestiones de afectación psicológica o psíquica lleguen a mezclarse las realidades causando daños, lesiones y/o hasta crímenes en la realidad física.

Las posibilidades del uso de este metaverso son incalculables, pero la recreación de este mundo paralelo requiere de un tremendo esfuerzo de diseño informático y de aplicaciones con alta tecnología. Pero es evidente que puede crear muchos puestos de trabajo, pero, también, es preciso fijar un control de uso y de unas reglas que determinen y predeterminen cómo actuar, cómo utilizar esta herramienta y cuáles son los límites para evitar confundir una y otra realidad, que es lo más peligroso de esta alternativa a lo que conocemos. También sería interesante fijar límites de uso, a fin de no convertir a las personas en mayores usuarios de esa vida virtual que la suya propia, ya que existe el grave riesgo de no detectar que se trata de un mundo artificial.

Varias películas de ciencia ficción se han realizado sobre este tema del metaverso, de realidades virtuales, y de mundos espejos. Pero en la actualidad de lo que antes era de ciencia ficción se ha pasado a convertir este tema en una realidad ante la fuerza con la que se está trabajando y hablando de este fenómeno. El problema es que son muchas las cuestiones que hace años las veíamos en películas de ciencia ficción y ahora las estamos viendo en la realidad, como aquellas películas de virus que se extendían por el mundo, guerras ya vividas, etc. Actuemos con cuidado, pues.

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