Del lado de la oferta

El déficit comercial se reduce a la mitad y las exportaciones vuelven a marcar récord.

El déficit comercial se reduce a la mitad y las exportaciones vuelven a marcar récord. / EP

Francisco Pastor Pomares

Francisco Pastor Pomares

Los datos publicados acerca del comportamiento de las exportaciones españolas durante 2023 vienen a confirmar la tendencia que ya habíamos observado durante los primeros meses del año, es decir, una contracción de las ventas españolas hacia el exterior que se produce en la mayoría de los sectores industriales, exceptuando la alimentación, los bienes de equipo y el automóvil.

En la Comunidad Valenciana, con una caída interanual del -3,48 por ciento, solo el sector de alimentación y el de bienes de equipo han tenido un mejor comportamiento respecto al año anterior.

Exportaciones Comunidad Valenciana 2022-2023

Exportaciones Comunidad Valenciana 2022-2023 / INF

Por otra parte, los informes sobre los índices de producción industrial española en ese mismo año reflejan, igualmente, una bajada del -0,8 por ciento para el conjunto del año y del -1,9 por ciento en cuanto a la cifra de negocios. Estos mismos índices referidos a la Comunidad Valenciana serian del -3,7 y del -6,3 por ciento.

Unido a un menor crecimiento del PIB y al mantenimiento de nuestro déficit exterior (en 2023 las importaciones superaron a las exportaciones en 40.500 millones de euros), estos datos son síntomas de problemas de competitividad en la producción interior, al margen de que los shocks externos como la guerra de Ucrania hayan provocado una desaceleración económico en nuestros principales socios europeos.

Las proyecciones para 2024 no presentan mejoras en el crecimiento, por lo que se intuye que las exportaciones españolas podrán volver a sufrir descensos significativos en aquellos sectores con peores ventajas comparativas, sin que vislumbremos a corto plazo una revisión europea a las politicas de competencia respecto a las medidas autonomas que tanto EEUU como China vienen empleando para proteger sus industrias.     

Mejorar la competitividad de las empresas españolas exportadoras requiere conseguir mayores indices de productividad en el empleo y una politica industrial del lado de la oferta que eleven el PIB potencial aplicando medidas consistentes basicamente en la supresión de reglamentaciones innecesarias, el mantenimiento de un sistema legal eficiente y el fomento del progreso tecnológico.     

Esta nueva economía del lado de la oferta hace bastante hincapié en la intervención del Estado para impulsar la inversión en infraestructuras, digitalización, energía y vivienda. El Programa de Estabilidad 2023/2026 que España ha presentado ante la UE va encaminado a crecer en este sentido a través fundamentalmente del Plan de Recuperación, con un aumento sustancial en 2024 del capital fijo y con nuevas reformas en el empleo que faciliten un aumento de la productividad —el gobierno actual prevé que entre 2030 y 2050 la productividad se convierta en el primer motor del crecimiento del PIB­­—.

Sin embargo, las circunstancias actuales en que se encuentra la política española, polarizada en extremo y con una tendencia cada vez mayor al surgimiento de populismos de toda clase y condición, hacen crecer la incertidumbre en el mundo económico y empresarial acrecentando las dudas de que puedan llevarse a cabo las medidas de impulso que España precisa para la estabilidad económica.