Opinión | EL TELEADICTO

Espectadores privilegiados

Una mujer trata de sintonizar su televisión.

Una mujer trata de sintonizar su televisión. / / BERNABÉ / GUTIER

Los espectadores que residen en las provincias de Barcelona, Tarragona, Lleida y Girona, cuando sintonizan La 2, ven una programación distinta a la del resto de las otras 48 provincias (salvo Canarias). No por ello los catalanes se privan de la programación de La 2 que vemos el resto de los españoles. Ellos son espectadores gourmet con derecho a un menú cinco estrellas.

El día a día se articula en torno a dos magacines en directo. Por la mañana Gemma Nierga presenta el Café de las ideas, dos horas en las que cabe la tertulia política y las entrevistas. Por las tardes, Danae Boronat coordina durante hora y media L´altaveu, mientras en el resto de España vemos documentales emitidos sin orden ni concierto.

Solamente la existencia de estos dos magacines marca una zanja profunda entre los contenidos de La 2 que ven los catalanes, y la que llega al resto del país. De contar con esos 210 minutos de televisión diaria en directo a no tenerla dista un abismo. Además, David Fernández (ya con el pelo blanco y alejada su etapa de Chikilicuatre) y Nerea Sanfe están al frente de De carrer, y Tània Sarrias Punts de vista, el mejor cultural de la televisión actual (Culturas 2 es su spin off en castellano). Todo ello, les recuerdo, sin perder ni uno solo de los programas que vemos nosotros.

A todo esto, en el centro territorial de València continuamos con el triste informativo en un plató que se escucha con sonido deficiente. Y no hay ni un político que se haya quejado por amor propio.