Pues parece ser que no, que no era suya el acta en cuestión, y mucho menos el poder destruirla. Yo me pregunto si una magistrada comete un error de tal calibre con el problema que acarrea ¿no tendría que tener alguna responsabilidad? Ahora, se tiene que celebrar de nuevo un juicio con el coste que esto supone por no hablar del sentir de lo familiares.

La verdad es que cuesta creer la frase de que la justicia es igual para todos. Yo creo que esa frase es más un deseo que una realidad.