A la ya más que conocida falta de empleabilidad entre los jóvenes, tenemos que sumarle una nueva barrera de entrada: la experiencia laboral. 

Se podrían contar con los dedos de una mano las ofertas de empleo, en las que no aparece como requisito indispensable la posesión de experiencia de al menos 3 o 5 años. 

Ustedes como empresas, también forman parte del proceso formativo de la persona empleable y deberían conceder más oportunidades al público joven. De lo contrario, no es posible obtener esa experiencia, entrando en una espiral sin salida. 

Somos un colectivo con muchas ganas de poder demostrar nuestra valía, pero necesitamos ser respaldados y contar con el apoyo de las autoridades y empresas.

Para ello, sería necesario contar con un consenso a nivel político y empresarial (el cual no espero) para poder disminuir la tasa de paro juvenil estructural, que posee España desde hace innumerables décadas. 

¿De dónde vamos a obtener la financiación para las pensiones del futuro? Con nuestras míseras cotizaciones lo llevamos claro..."