El presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, ofrecerá esta tarde una conferencia en el Club Siglo XXI de Madrid, actualmente presidido por el que fuera jefe del Consell entre 1995 y 2002, Eduardo Zaplana. El expresidente autonómico y exministro de Trabajo ha invitado a Fabra a participar en un ciclo de análisis de la actualidad política, con aspectos como la reforma de las administraciones públicas y la financiación autonómica como contexto. La presencia de Fabra en la entidad, además, será en cierta forma una escenificación de la buena relación existente entre el actual presidente y uno de sus antecesores al frente de la Generalitat.

La cercanía en el trato personal entre Fabra y Zaplana es ya conocida en ámbitos políticos, pero prácticamente no se ha dejado ver en actos públicos hasta la fecha. La estrecha relación entre los dos dirigentes populares, además, contrasta con el distanciamiento que existía entre Zaplana y su sucesor, Francisco Camps, y que dio pie a notables divergencias en el seno del PP en la Comunidad Valenciana. Esto hace que la visita del jefe del Consell al Club Siglo XXI genere cierta expectación, más allá de lo que implica de por sí la asistencia del presidente autonómico a este foro de debate.

Desde que Eduardo Zaplana asumió las riendas del Club Siglo XXI, en octubre de 2012, el expresidente de la Generalitat y exministro ha puesto un destacado empeño en devolver a la entidad la relevancia de décadas pasadas como espacio de encuentro y tertulia política y económica. La conferencia de Fabra llevará por título «Nuevos tiempos de reformas» y, aunque no se han adelantado datos de su contenido, fuentes próximas a Presidencia de la Generalitat apuntaron ayer que uno de los aspectos a abordar en ella sería la reforma de la administración en la Comunidad. Tampoco se descarta que Fabra haga alusión a una de las piedras angulares de su discurso durante los últimos meses: la financiación autonómica.

El presidente de la Comunidad podría aprovechar su conferencia en la capital para reclamar alto y claro en Madrid lo que hace unas semanas pactó en Valencia junto a los líderes autonómicos de Murcia y Baleares, un nuevo modelo que cubra los servicios básicos de educación, sanidad y bienestar social. En este sentido, cabe recordar que estas materias implican un gasto de 10.088 millones de euros anuales, pero la cantidad recibida del Estado son 8.276 millones.