Gazpacho vs salmorejo: estas son las diferencias de los platos más ligeros del verano

El gazpacho y el salmorejo son platos tradicionales españoles, especialmente populares en Andalucía, que se sirven fríos y son ideales para los meses cálidos del verano. Ambos se basan en el tomate como ingrediente principal, pero tienen diferencias tanto en ingredientes como en textura y forma de servir.

Estas son las principales diferencias entre el gazpacho y el salmorejo

Gazpacho

Es una sopa fría a base de hortalizas crudas licuadas. Sus ingredientes principales son tomates, pepinos, pimientos, cebolla, ajo, pan, aceite de oliva, vinagre y agua y su textura es más líquida que el salmorejo.

Se suele servir como bebida o sopa, a menudo con tropezones de sus mismos ingredientes picados por encima.

Salmorejo:

El salmorejo es una crema fría, más espesa que el gazpacho, preparada con tomates, pan, aceite de oliva, ajo y vinagre. Su textura es más espesa y cremosa y se sirve generalmente como plato principal o entrante, frecuentemente adornado con jamón serrano y huevo duro picado.

Gazpacho: la receta tradicional

• Ingredientes:6 tomates maduros
• 1 pepino
• 1 pimiento verde
• 1 pequeña cebolla o cebolleta
• 1 diente de ajo
• 2 rebanadas de pan del día anterior
• 3-4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
• 2 cucharadas de vinagre
• Sal y agua al gusto
• Instrucciones:Lava y pica groseramente los tomates, pepino, pimiento y cebolla.
• En una batidora, combina las verduras, el ajo, el pan, el aceite de oliva, el vinagre y sal. Licúa hasta obtener una mezcla homogénea. Si está muy espeso, puedes añadir agua para obtener la consistencia deseada.
• Refrigera por al menos 2 horas antes de servir.
• Sirve frío, con tropezones si lo deseas.

Salmorejo: la receta más sencilla

• Ingredientes:1 kg de tomates maduros
• 200 gr de pan del día anterior
• 100 ml de aceite de oliva virgen extra
• 1 diente de ajo
• 2 cucharadas de vinagre
• Sal al gusto
• Jamón serrano y huevo duro para adornar
• Instrucciones:Lava los tomates y quítales el pedúnculo. Córtalos en cuartos.
• En una batidora, combina los tomates, el pan previamente remojado en agua, el aceite de oliva, el ajo y el vinagre. Licúa hasta obtener una crema suave y homogénea.
• Refrigera por al menos 2 horas antes de servir.
• Al servir, adorna con trozos de jamón serrano y huevo duro picado.

Ambos platos son ricos en antioxidantes, vitamina C y otros nutrientes beneficiosos, y son opciones refrescantes y saludables para los meses de calor.