En un país donde predominan las tonalidades suaves y los fondos lisos en cualquier complemento del hogar, la muestra española ofrece un respiro de color y originalidad, para ser visitado hoy y mañana por empresarios nipones del sector.

Infinidad de modelos de flor, cuadros de distintos tamaños, rayas anchas verticales y otras finas y horizontales, además de colores lisos muy vivos, como el amarillo, visten a los expositores de la feria.

Entre los complementos del hogar destacaron las cortinas de talle largo, aunque también se exhibieron todo tipo de productos confeccionados como colchas, almohadas y tejidos para cubrir los sofás a juego con el resto de elementos del salón.

"El estampado típico de la flor aquí es un producto que siempre funciona bien", explicó a Efe Ángel Pascual, técnico de la patronal valenciana ATEVAL, organizadora de esta cita, con financiación del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX).

La feria, que se inauguró hoy en la Embajada de España en Tokio, cuenta con la participación de siete empresas valencianas, dos catalanas y una de Aragón, algunas de las cuales acuden a la cita nipona por cuarta vez.

La presencia de los comerciales españoles en Tokio permite una toma de contacto directa con los posibles compradores japoneses, a los que les interesa mucho más "ver el catálogo in situ", indicó Pascual.

"El cliente japonés quiere que le visites", añadió este profesional del sector, que viajó a Japón con motivo de la inauguración de la feria.

Para los representantes de la empresa Textiles Frau Pérez, de Alcoi (Alicante), el cliente japonés es "muy fiel cuando ya trabajas con él, aunque para empezar es muy costoso", en referencia a la dificultad del idioma y de establecerse como negocio.