Otro desafío en las redes sociales que está acabando mal para muchos de sus participantes. En este caso, el nuevo reto es el "One Chip Challenge" y consiste en comer una patata frita ultrapicante y pasar un determinado tiempo sin beber nada. Algunos jóvenes han tenido que ser hospitalizados. En un distrito escolar de California al menos tres estudiantes de secundaria fueron ingresados tras ingerir este producto.
Varios alumnos de Lodi High School, cerca de Sacramento, necesitaron atención médica. "Cada estudiante que ha participado ha tenido una reacción similar, luchando por respirar y recuperar el aliento", explicó Adam Auerbach, director de la escuela, al periódico local The Lodi News-Sentinel. "También hemos tenido estudiantes vomitándose encima", añadió.
El profesor de la citada escuela, viendo las consecuencias del "juego", decidió enviar un mensaje a los padres advirtiendo de que "varios estudiantes ya han sido enviados a casa y han sido derivados a la sala de emergencias debido a sus reacciones a la sustancia".
Este desafío viral fue creado por la marca fabricante de las patatas fritas en cuestión, Paqui, con el hashtag #onechipchallenge en TikTok.
Este snack lleva pimientos Carolina Reaper y Scorpion, según figura en la web de la marca, que lo describe como "un chip que hace llorar los ojos y que induce a la maldición, hecho con los pimientos más picantes del planeta".
El hecho de que algunos rostros conocidos hayan tomado parte en el desafío ha contribuido a su popularización. La activista y política estadounidense de ascendencia puertorriqueña Alexandria Ocasio-Cortez también se grabó en Navidad probando el Paqui.
"¡Oh Dios mío, oh Dios mío! Aliento de león... esto pica mucho. Mis oídos están ardiendo", dijo mientras aguantaba más de un minuto sin beber nada.