Agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil se han incautado de 15.718 kilos de pescado y marisco congelados y caducado que se encontraba almacenado para su comercialización en una nave de un polígono de Huévar del Aljarafe (Sevilla).

Los agentes han requisado pescado y marisco de hasta 23 especies diferentes y que no eran aptos para el consumo, alguno de los cuales llevaban varios años caducados.

Entre el género intervenido se encuentran 2.672 kilos de langostinos, 2.103 de gambas, más de 3.000 de cangrejos, 1.312 kilos de calamares y 760 kilos de cigalas, ha informado hoy la Guardia Civil.

Los agentes dieron con la mercancía tras el establecimiento de un punto de verificación por el cual se pararon a varios camiones dedicados al transporte de productos del mar.

La Guardia Civil preguntó a los conductores sobre el origen de la mercancía y todos señalaron a la misma empresa suministradora.

Agentes del Seprona de la Comandancia de Sevilla y la Guardia Civil de La Puebla del Río realizaron entonces una inspección en el almacén de la empresa señalada por los transportistas, que se encontraba en un polígono industrial de Huévar del Aljarafe.

Los guardias civiles, acompañados de veterinarios del Distrito Sanitario del Aljarafe, iniciaron la inspección de la mercancía, que arrojó más de 15.000 kilogramos de pescado y marisco caducados.