"El alcalde de Lleida, Àngel Ros, y toda la corporación municipal, en nombre de la ciudadanía, manifiestan su dolor por la muerte de los cuatro bomberos leridanos en el incendio de Tarragona y transmiten su solidaridad y pésame a las familias", señala el consistorio en un comunicado.

Además de los cuatro bomberos fallecidos en el incendio, otros dos compañeros se encuentran graves en la Unidad de Quemados del hospital del Valle de Hebrón de Barcelona,, con quemaduras en el 75% de su cuerpo.