La Audiencia Provincial ha impuesto una medida de seguridad de diez años de internamiento en un Psiquiátrico Penitenciario al acusado de haber acuchillado al empleado de una fundación en Alicante, según la sentencia a la que ha tenido acceso este diario. El hombre no es imputable penalmente a causa de un trastorno esquizofrénico y todavía está pendiente de ser juzgado por otras dos agresiones similares más cometidas en Madrid y en Murcia. Todas ellas contra trabajadores de la misma institución benéfica, Rastro Remar.

La Audiencia le juzgó por un delito de intento de asesinato y ha considerado probado que el procesado atacó de manera sorpresiva a la víctima sacándose un cuchillo de la ropa el 25 de mayo de 2018 después de haberle estado preguntando por unos colchones en las instalaciones de Remar en Alicante. «Toma hijo de puta, dale recuerdos a Miguel Díez (nombre del presidente de esta fundación)», le dijo mientras le clavaba el cuchillo en el abdomen.

El acusado tiene ideas delirantes con Rastro Remar, de quienes dicen que le han amenazado de muerte, le insultan y en cada ciudad que se encuentra le rodean con camiones y le amenazan. El acusado tiene otros dos juicios pendientes por hechos similares en los que fueron víctimas empleados en Remar en Alcalá de Henares y en Murcia.

La sala considera probado que el acusado padece una esquizofrenia paranoide desde 2004, lo que le hace inimputable por estos hechos. Por ello se acuerda el internamiento durante diez años como medida de seguridad.