La Fiscalía acusa al empresario de Alicante Javier Reina de estafar a un socio y le reclama ocho años de prisión

El expresidente de Terciario Avanzado está encausado por el presunto engaño a un inversor en un negocio de compra de aceite en Filipinas que nunca llegó a realizarse. El juicio se ha señalado para el próximo febrero 

El empresario Javier Reina, con chaqueta oscura, junto a su abogado, Carlos Peñarrubia,  en una imagen de hace unos meses.

El empresario Javier Reina, con chaqueta oscura, junto a su abogado, Carlos Peñarrubia, en una imagen de hace unos meses. / Alex Domínguez

Mercedes Gallego

Mercedes Gallego

 Estafa, apropiación indebida, falsedad en documento mercantil, administración desleal y delito societario. Son los cargos por los que en unos meses se sentará en el banquillo el empresario de Alicante y expresidente de la asociación Terciario Avanzado, Javier Reina, junto a otro socio, Francisco Javier Llobregat, acusado de los mismos cargos. A ambos les acusa la Fiscalía de engañar a un inversor/socio que aportó 100.000 euros para un supuesto negocio que nunca se llegó a realizar.  Dinero que se habría destinado a otros fines y que la presunta víctima, y ahora también acusador particular, no ha vuelto a ver y reclama. 

Delitos y penas

El Ministerio Público considera los hechos constitutivos de un delito de estafa y de otro continuado de falsedad documental, por los que pide en total ocho años de prisión para cada uno de los encausados acusando a Ociex España S.L. de un cargo de estafa agravada por el que reclama 400.000 euros. Eso además de indemnizar entre los tres (las dos personas físicas y la jurídica) al supuesto perjudicado en los 100.000 euros que aportó. 

La acusación particular agrega el cargo de apropiación indebida, como alternativa a la estafa, otro de administración desleal y uno societario por los que reclama en total 12 años de cárcel. En su caso, no acusa a la mercantil pero como responsables civiles solidarios cita a los dos acusados junto a las dos sociedades «dado que se valieron de su condición de socio, administrador o apoderado de las mismas, según el caso, para cometer los delitos». Reclama los 100.000 euros más los intereses y otros 10.000 por el daño moral.

 Los hechos se remontan a octubre de 2013 cuando, según recogen los escritos tanto de la acusación pública como de la particular, se creó la mercantil Ociex España con Reina como presidente, consejero y consejero delegado. Fue él quien habría sugerido al querellante, Ignacio Torregrosa, un empresario de Novelda que se dedica a la fabricación de palés, que se abriera a otras vías de negocio, para lo que le indicó «que se pusiera en contacto con la citada sociedad (Ociex España) al objeto de vender en mercados internacionales o captar el producto o materia prima que, a mejores precios, los clientes precisaran, interesándose Torregrosa en adquirir aceite de girasol para el consumo humano», relata al fiscal. 

 En un primer momento y como fruto de ese contacto, una empresa con la que el querellante tenía relación, Paramarmol Stone, «firmó un contrato de prestación de servicios con Ociex España por el que esta última se comprometía a localizar refinerías de aceite de girasol a unos precios determinados que, bien mediante la intermediación o bien a través de su compra y posterior venta a los clientes, Paramarmol pudiera acceder a su compra».

"Expertos en comercio internacional"

 La acusaciones apuntan que «Ociex España, en colaboración con el otro acusado, se presentaron como expertos en comercio internacional afirmando conocer el mercado del aceite de girasol para que, sin intermediarios, Paramarmol pudiera obtener unos precios muy competitivos».

 En cumplimento del contrato suscrito, Ociex comunicó a Paramarmol que había conseguido localizar el aceite en Filipinas a un buen precio y que necesitaban viajar a ese país para cerrar la operación, lo que se frustró al enterarse la otra parte de que las reuniones de la mercantil de Reina no estaban siendo con una refinería sino con un intermediario

 Los acusados insistieron entonces a Torregrosa «en que habían localizado el aceite a un precio que les permitiría realizar el negocio (…) proponiéndole constituir una sociedad al objeto de poder llevarlo a cabo». 

Fue así cómo nació Ociex Internacional S.L. y, «pese a que el capital social debía ascender a 3.010 euros, le comunicaron al querellante que dado que ya tenían cerradas las operaciones de aceite de girasol, para poder entrar en la sociedad tenía que aportar 100.000 euros para financiar los gastos, importe que le sería devuelto de forma inmediata», lo que nunca ocurrió.

 Ociex Internacional S.L., hoy Business World Alicante S.L., se constituyó el 1 de julio de 2014 siendo sus fundadores Reina, Ociex España, el otro acusado, un socio para el que se sobreseyeron las actuaciones y Torregrosa.

 Dos días después de la constitución, el empresario de Novelda aportó 100.000 euros que fueron transferidos a cuentas bancarias de otras sociedades en las que participaba Reina y que se emplearon en pagar gastos, imcluso personales, que nada tenían que ver con el negocio del aceite, según sostienen las acusaciones.

Facturas falsas

La Fiscalía concreta que «para evitar que Torregrosa se diera cuenta del engaño, y dado que él se encargaba del aspecto contable de Ociex Internacional, los acusados crearon facturas falsas bajo la apariencia de servicios reales de modo que éste autorizaba el pago de las mismas bajo la creencia de que se trataban de operaciones relacionadas con los negocios del aceite de girasol que jamás llegaron a concretarse». 

 Tanto Reina, que ahora está especializado en el modelo de oficinas flexibles, como su letrado, Carlos Peñarrubia, han declinado aportar su versión de los hechos para ser publicada pese que este medio se la ha solicitado en reiteradas ocasiones. 

 El inicio del juicio por estos hechos está señalado para los primeros días del próximo febrero en la Audiencia Provincial.