Los hechos ocurrieron sobre las 23 horas del 15 de julio de 2006, durante una fiesta de cumpleaños en el pantano de La Pedrera, cuando el acusado y un menor ya condenado por estos hechos esperaron a que la mujer saliera de los aseos para llevarla a una zona apartada, tirarla al suelo y desnudarla contra su voluntad. Según el fiscal, el menor la violó mientras el otro la sujetaba por el cuello y le tapaba la boca y luego se intercambiaron los papeles. Después la dejaron sola, con lesiones que tardaron en curar 90 días. Aún hoy presenta un trastorno por estrés traumático.