Comerciantes de la calle Caballero de Rodas, inmersa en obras de reurbanización desde hace meses, han expresado su preocupación por la paralización de la actividad en las obras que han detectado sobre todo en el tramo comprendido entre la calle María Parodi y Apolo. Además la prolongación de esta actuación en la calle Chapaprieta prevista para el 1 de octubre no ha comenzado. El plazo para la culminación del proyecto se sitúa en teoría en el 31 de diciembre, condicionado por las limitaciones del Gobierno central a la concesión de los fondos estatales de inversión local (FEIL), que financian las obras.

Según las mismas fuentes responsables de la empresa adjudicataria Sedesa han explicado "verbalmente" a los afectados que no van a continuar hasta nueva orden con la actuación en esta zona hasta nueva orden. De hecho en este tramo los operarios trabajan a medio gas desde hace más de una semana, según las mismas fuentes. Este diario no pudo contrastar esta información con la empresa adjudicataria. Estos retrasos están impacientando a unos empresarios -121 comercios y 10 bares- que a los efectos de la crisis han tenido que sumar la caída de ventas por las obras. Al aparente "parón" se suma la incertidumbre creada por las reclamaciones del Gobierno central al equipo de gobierno derivadas del retraso de la documentación sobre los proyectos FEIL, lo que obligará al Ayuntamiento a presentar un recurso si quiere cobrar esta inversión de 16 millones de euros -3,5 en Caballero de Rodas-. Algo que podría complicar el pago a los adjudicatarios. El alcalde Pedro Hernández, además de restar importancia a los problemas administrativos, ha explicado que entiende todos los inconvenientes derivados de las obras pero insiste en que los beneficios superan ampliamente a las desventajas iniciales y recuerda los casos anteriores de Ramón Gallud, Azorín, Concepción o en su día a la hostelería en el Paseo de Juan Aparicio.