El colector de aguas residuales de Orihuela Costa en La Zenia reventó ayer dejando sus vertidos a escasos metros de este popular tramo del litoral. La rotonda de la Avenida de las Palmeras situada antes del puente de la Nacional 332 se encontraba a mediodía de ayer totalmente anegada de aguas fecales procedentes del alcantarillado, mientras una retroexcavadora y varios operarios intentaban localizar la avería levantando el subsuelo. Los caudales recorrieron una distancia de casi un kilómetro hasta la playa, sin llegar a afectar directamente al litoral, donde cientos de turistas disfrutaban de una jornada casi veraniega. Un cisterna retiró las aguas acumuladas en la estación de bombeo, mientras que los operarios de Aguagest, la empresa encargada del mantenimiento del ciclo hídrico en Orihuela, trabajaban contrarreloj para "dar con la tecla" del origen del vertido.

Coincidencia e insulto

El pasado martes el concejal de Orihuela Costa, José Antonio Aniorte, aseguraba que un vertido de menor entidad que se produjo en el mismo punto, hace una semana, el Viernes Santo, tenía su origen en el uso de los desagües de evacuación que hacían los residentes en la Costa al arrojar "sólidos" en la red de alcantarillado, lo que provocaba su "atasc0 puntual", además de acusar al partido independiente de la Costa "Claro" de causar alarma. Este edil explicó que la avería de hace siete días se produjo por al obstruirse el bombeo. La de ayer, localizada a unos cien metros, tiene su origen en la rotura de la tubería de no más de diez años que se agrietó debido a la presión que ejercía la tierra empapada por el anterior vertido. El concejal dijo que en este caso no se trata de un colector que estuviera en malas condiciones y esta sucesión de averías "es casual".

El partido Claro, que no tiene representación en el Ayuntamiento, y que insiste en alertar de los problemas en infraestructuras básicas de esta zona de Orihuela desde hace años se mostró ayer muy crítico con las declaraciones de Aniorte sobre una situación que se repite con frecuencia: "Son un insulto a los vecinos y veraneantes" y ayer ya fueron muchos los residentes que presenciaron el vertido los que expresaron su "indignación" Para este colectivo, la red de tuberías de la Costa es "obsoleta", algo que han podido demostrar en reiteradas ocasiones, como cuando se denunció el vertido de fecales en Barranco Rubio -el Ayuntamiento tuvo que emplear cerca de 380.000 euros en corregir los fallos-. Se puso en evidencia de nuevo en la calle Lapislazulí. En esa zona la administración local actuó sólo después de ser protagonista en los medios de comunicación por las imágenes en las que se observaban "fuentes" de aguas negras elevándose desde los registros, e invirtió cerca de 500.000 euros en su renovación. Además, con el gasto conjunto del Ministerio de Fomento y el Ayuntamiento, se ha construido una infraestructura de bombeo para evacuar los pasos subterráneos de la Vía Parque en Playa Flamenca, que todavía debe ponerse a prueba de las lluvias torrenciales.

El litoral cuenta con 48 bombeos que impulsan hasta la depuradora de la Costa las aguas procedentes de cincuenta urbanizaciones con más cincuenta mil viviendas ubicadas a lo largo de 16 kilómetros . Una parte de estas infraestructuras se instalaron con una capacidad mucho menor del caudal que les llega en los momentos de mayor evacuación de aguas residuales, como Semana Santa y verano, en los que esta zona litoral sobrepasa ampliamente los 150.000 residentes. A lo que se suma que no existe red de aguas pluviales.