Los Servicios Sociales de la Conselleria no se llevaron a los tres hijos de una madre del Raiguero de Bonanza, la cual recibió el apoyo de algunos de sus vecinos que se concentraron el lunes para pedir a Bienestar Social que reconsiderase su posición acerca de la retirada de la custodia de los menores a su progenitora. María Antonia Guil, la portavoz de los conciudadanos de la mujer afectada, señaló que los asistentes sociales llegaron ayer para llevarse a los niños a un centro, si bien no llegaron a ejecutar el traslado porque los vecinos hablaron con un responsable municipal la noche anterior para que el Ayuntamiento mediase en el asunto.

Según Guil, la concejala de Bienestar Social, Araceli Vilella, se comprometió ayer a mediar en la retirada de los niños de su madre. Además, los vecinos del Raiguero de Bonanza pagarán los servicios de un abogado para que asesore a la familia. La portavoz indicó que los Servicios Sociales manifestaron que "volverían a por los niños", pero consideró que la familia "consiguió un tiempo valioso" para lograr que finalmente no se traslade a los niños.

Este diario publicó hace unos días que Bienestar Social avisó en julio de 2010 a la familia que retiraría la custodia a la madre de los niños, que tienen cuatro, dos y un año, por "abandono". La mujer tiene 22 años y un grado de discapacidad intelectual del 40 por ciento, aseguró Guil. Los vecinos enviaron entonces un escrito acompañado de 100 firmas a los servicios sociales para pedir que reconsiderasen su posición.

Asimismo, los solicitantes se comprometieron a "vigilar" que la familia cumpliese las condiciones puestas para que los menores permaneciesen junto a su familia. En caso de que no fuese así, la portavoz expuso que los vecinos serían "los primeros en denunciarlo".