Las lluvias de los últimos días han provocado, de manera indirecta, que el caudal río Segura a su paso por la comarca de la Vega Baja aumente. Según el Comisario de Aguas de la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), Manuel Aldeguer, las "aguas de retorno" de las acequias de la Vega Alta y la Vega Media han incrementado el caudal. Los agricultores que explotan tierras en esos tramos del Segura no han utilizado el agua que llega hasta sus parcelas a través de canales de riego porque ha llovido, de modo que ese líquido ha vuelto a desembocar, aguas abajo, al Segura.

"Cuando el río suena, agua lleva", dice el refrán, aunque tiene un significado distinto al que ayer se le daba en Orihuela. Después de meses sin escuchar el fluir del agua por el tramo de cauce que atraviesa el casco urbano, ese sonido hizo que muchos se detuviesen a contemplar como el agua saltaba la "contraparada" en la que el líquido se va hacia las acequias de Callosa y de Almoradí y seguía su curso natural.

Aldeguer indicó que, en Orihuela, el caudal registrado era de "entre 12 y 15 metros cúbicos por segundo". Esa agua, que no fue aprovechada por los agricultores, que ya tenían suficiente con las lluvias del fin de semana, fue a parar al mar. No obstante, dada la capacidad desagüe del río Segura, el riesgo de inundación es nulo, apuntó. El Comisario de Aguas insistió en que "el aumento del caudal no se debe directamente a la lluvia, sino a que los agricultores no han cogido el agua que llega por las acequias".

El Comisario de Aguas de la CHS detalló que el caudal registrado en Murcia apenas superaba los cinco metros cúbicos, ya que el agua se desvió a los canales de riego en la contraparada, situada a diez kilómetros de esta ciudad. La mayor parte de esta agua retornó al río más abajo, pues los labradores no hicieron uso de ella al haber llovido.

El sistema de regadío de la cuenca del Segura funciona de manera similar al sistema circulatorio del cuerpo humano. El agua es tomada del río y se lleva hasta los campos de cultivo a través de las acequias y los azarbes. Si el agua no se utiliza, esos mismo canales la llevan de nuevo al cauce del río Segura. En caso de que se riegue, el agua se filtra por la tierra hasta llegar a una capa impermeable. La pendiente del terreno permite que el agua circule bajo tierra hasta llegar, otra vez, al río Segura.

suciedad en rojales

El agua arrastra cañas, plásticos y animales muertos

Con las crecidas del río, suele llegar la suciedad que, durante los períodos de escasez, invade el cauce del Segura. Aunque la CHS invierte bastante tiempo y dinero en limpiar el encauzamiento del río, las cañas y los restos que algunas personas arrojan al río se acumulan en puntos donde el cauce se estrecha. Ese es el caso del puente de Carlos III de Rojales, donde ayer se acumularon kilos de cañizo, plásticos e, incluso, animales muertos.