En la desembocadura del río Segura y su entorno de dunas y pinar habitan 172 especies de ave. Esa es la conclusión del trabajo realizado por una veintena de voluntarios de Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) que han estado trabajando durante un año inventariando y fotografiando la fauna que vive en este espacio, y que, poco a poco, se recupera de algunos de los graves impactos ambientales que ha sufrido durante décadas. De hecho, los autores del trabajo remarcan que por primera vez se ha observado la presencia de dos plantas acuáticas que confirman una "sensible" recuperación de la calidad del agua.

Durante el trabajo de campo se han detectado 133 especies ornitológicas, pertenecientes a 38 familias, que se suman a los datos de otras especies observadas con anterioridad. Con esta información AHSA está redactando un completo documento de la diversidad ornitológica que tiene la desembocadura y que recogerá esas 172 especies de aves, con un comentario de las circunstancias y lugar de las observaciones de cada especie. Además estará ilustrado con gran variedad de fotografías, principalmente de las aves más comunes. Este documento estará disponible en la página web de la asociación para que pueda ser consultado o descargado.

Entre las aves que se pueden hallar ahora de forma común sobresalen las garzas. Y en este caso, indican los voluntarios, es "relativamente fácil observar a casi todas las especies que frecuentan el sur de Alicante, algunas especies de limícolas, las diferentes gaviotas, charranes y otras aves marinas, algunas especies de patos y rapaces". También los pequeños paseriformes,- los pájaros más pequeños- tienen una extensa representación, con especies de ambientes forestal, palustre o de zonas abiertas. Para los autores de este informe la razón de esta gran diversidad ornitológica está en la confluencia de diferentes ambientes en un espacio relativamente pequeño: Desde el propio cauce del río y sus orillas intensamente pobladas de carrizo a las zonas de huerta, pinadas, dunas herbáceas, playas y, finalmente, el frente litoral, donde puede ser observada una buena representación de las aves marinas que frecuentan el mediterráneo.

Recuperación de las aguas

En cuanto a otros valores ambientales, "uno de los más sobresalientes" son las primeras citas en el paraje de galápago leproso (Mauremys leprosa), con 6 ejemplares. Es una especie protegida incluida en el catálogo de especies amenazadas de Fauna de la Comunidad Valenciana como "vulnerable". También se ha observado por vez primera la presencia de al menos dos especies de macrófitos acuáticos (plantas acuáticas) y que son la prueba de una sensible recuperación de la calidad de las aguas del Segura.

AHSA inició en noviembre de 2010 este estudio, subvencionado por el Ministerio de Medio Ambiente a través del Programa de Voluntariado en Ríos, en el que han participado tanto miembros de la asociación como colaboradores. El trabajo de campo se ha prolongado durante 11 meses. Además de esa catalogación de especies, las jornadas de observación se aprovecharon para obtener datos de otros valores ambientales y de la detección de impactos y se va a proponer a la Confederación Hidrográfica del Segura una serie de medidas correctoras para mitigar "el efecto de los impactos detectados".

Buen resultado de las nuevas láminas de agua

La gestión del carrizo por parte de la CHS, con la excavación del cauce que ha formado nuevas láminas de agua, el segado de las cañas y la introducción de vegetación autóctona que compite con el carrizo ha producido cambios, valoran autores del trabajo, que han beneficiado a la diversidad ornitológica presente en la zona. "Es muy acertada la línea de trabajo" emprendida de utilizar este tipo de técnicas de control de la vegetación de los cauces y renunciar a la utilización de otras acciones más agresivas con el medio natural. D.P.